Paleolítico: Evolución Humana y Cultura en la Edad de Piedra Antigua
Clasificado en Psicología y Sociología
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Paleolítico: Paleo (Piedra) - Litico (Antiguo)
El Paleolítico se caracteriza por dos procesos interdependientes:
a) Hominización
Los primates evolucionan física y mentalmente, desde los simios hasta el Homo sapiens sapiens. La hominización implica la adquisición de características que definen a los humanos.
b) Cultura
La cultura es todo lo que el ser humano hace, lo que le permite modificar la realidad. Es aprendida, se adapta al ambiente, es variable y se manifiesta en reglas, normas y objetos materiales. Durante este periodo, el planeta experimentó grandes cambios climáticos, alternando entre glaciaciones (periodos fríos) y desglaciaciones (periodos cálidos). Estos cambios tuvieron una repercusión directa en la flora, la fauna y su distribución en el planeta.
Proceso de Hominización
La hominización comenzó hace 4,000,000 de años en diferentes partes del mundo, siendo África el lugar más importante debido a que allí se inició la evolución humana. Este proceso se puede resumir en cuatro puntos clave:
- Adquisición de la posición bípeda: Permitió liberar las manos, facilitando el transporte de objetos, la manipulación y la locomoción.
- Aumento de la capacidad craneana: Favoreció el desarrollo mental.
- Disminución de la musculatura del aparato masticatorio: Contribuyó al desarrollo del lenguaje.
- Desarrollo del movimiento de rotación y oposición del dedo pulgar: Posibilitó una mejor manipulación de objetos (acción de pinza).
Modos de Vida y Tecnología en el Paleolítico
El hombre del Paleolítico se organizaba en bandas nómadas de aproximadamente 50 personas, unidas por lazos de parentesco. La actividad económica y la tecnología estaban directamente relacionadas con su hábitat y el medio geográfico. Las bandas se organizaban según el sexo y la edad. Los hombres se dedicaban a la caza, la pesca y la fabricación de armas y herramientas. Las mujeres y los niños recolectaban frutas y semillas, trabajaban los cueros, cazaban aves y animales pequeños, y preparaban la comida.
Las cavernas no se utilizaban como viviendas permanentes, sino como refugios temporales y centros ceremoniales o religiosos. Las preocupaciones sobre la vida, la muerte y la supervivencia llevaron al desarrollo del arte rupestre (pinturas en las paredes de las rocas) y los ritos funerarios. Estos ritos consistían en enterrar a los muertos con sus pertenencias, ya que se creía que las necesitarían en la otra vida.