Panorama de la Poesía Española: Evolución y Tendencias Tras la Guerra Civil
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Situación histórica y política tras la Guerra Civil Española
Tras la Guerra Civil, España quedó dividida en dos bandos, vencedores y vencidos, lo que afectó profundamente al ámbito cultural. Las nuevas generaciones se encontraron sin modelos a seguir debido al exilio exterior de los escritores afines a la República, el asesinato de Lorca, el encarcelamiento de Miguel Hernández y la censura que debían sortear los escritores que permanecieron en el país, en el llamado exilio interior.
La poesía en la década de los 40
En la década de los 40, la producción lírica se articuló en torno a tres revistas principales:
- Garcilaso: Agrupaba a los escritores afines al régimen, la "juventud creadora", como Luis Rosales. Practicaban la poesía arraigada, ejemplificada por Dámaso Alonso, basada en un mundo ordenado y sereno con temas como Dios, la patria y la familia.
- Espadaña: Nació en León y reunió a los poetas contrarios al régimen. Tenían una visión del mundo pesimista ante el caos y la injusticia. Seguían la poesía desarraigada de Dámaso Alonso, en la que el mundo se percibía como un caos. Esta poesía se caracterizaba por su corte existencialista de tono trágico, que indagaba sobre el sufrimiento humano. La religión era tratada con tonos de desesperanza, duda e increpación a Dios. Destacan los primeros poemarios de Gabriel Celaya y Blas de Otero, Sombras del paraíso de Vicente Aleixandre e Hijos de la ira de Dámaso Alonso.
- Cántico: Se alejó de las tendencias anteriores. Destacaron García Baena y los poetas del Postismo, el último movimiento vanguardista fundado por Edmundo de Ory, que defendía la libertad expresiva y el sentido lúdico del arte.
La poesía en la década de los 50: Poesía Social
En la década de los 50, se abandonó el tono individualista anterior para concentrarse en la poesía concebida como comunicación, donde el poeta se erigía como portavoz del sufrimiento colectivo. Se conoce como poesía social, que debía tomar partido ante los problemas del mundo y ser un instrumento de denuncia y cambio sociopolítico. Utilizaban un lenguaje sencillo y directo para poder llegar a la mayoría. El mensaje primaba sobre la forma, y se seguía a poetas como Miguel Hernández o Antonio Machado. Fue cultivada por Blas de Otero y José Hierro.
Finales de los 50: Poesía del Medio Siglo o de la Experiencia
A finales de los 50, muchos poetas abandonaron la poesía social, desengañados por la imposibilidad de llegar a la mayoría y debido a que esta había caído en panfleto político y se utilizaba como un medio para el cambio político, devaluando su condición artística. Los que fueron los "niños de la guerra" tenían una visión distanciada de la Guerra Civil y no sentían la urgencia de utilidad que los mayores le daban a la poesía. Por contra, sí continuaron con el compromiso cívico y humano a la vez que elevaban la calidad artística. La poesía pasó a entenderse como una forma de conocimiento del mundo que nos rodea. Es una lírica inconformista y escéptica que se aleja del panfleto y se acerca a la poesía de experiencia personal, por lo que se conoce como poesía del medio siglo o de la experiencia. Trataban temas como la infancia, la familia, la amistad, el amor, el erotismo y la homosexualidad mediante un estilo aparentemente conversacional con presencia de la ironía. Sus cultivadores fueron Ángel González, José Ángel Valente y el Grupo de Barcelona: Jaime Gil de Biedma, Juan Goytisolo y Carlos Barral.
La poesía del exilio
Hay que mencionar también la poesía del exilio. El tema recurrente es la patria dejada atrás y ocupada por el bando vencedor, a la que en un principio sienten rechazo y posteriormente añoranza, ya que es donde vivieron su infancia y juventud. Destaca Español del éxodo y del llanto de León Felipe.
Comentario de texto
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