Panorama del Teatro Español: Dictadura, Transición y Experimentación

Clasificado en Lengua y literatura

Escrito el en español con un tamaño de 2,76 KB

Evolución del Teatro Español: Desde la Posguerra hasta la Actualidad

Años 40: Teatro Continuista y de Humor

Después de la Guerra Civil, el teatro español había perdido a sus mejores dramaturgos, y otros se exiliaron. El teatro debía luchar contra una doble censura, ya que los empresarios se negaban a representar obras de crítica social por miedo a que les cerraran el teatro.

Dos tipos de teatro:

  • Continuista: Eran comedias de evasión para un público burgués (José María Pemán, Luca de Tena).
  • Cómico: Buscaba la risa del público y criticaba las costumbres de la burguesía. Destaca en estas obras Miguel Mihura, con Tres sombreros de copa.

Años 50: Teatro Social

Refleja las inquietudes de la época. Utilizan un lenguaje indirecto y simbólico. Estos autores transmitieron mediante sus personajes la falta de libertad, la hipocresía, la desigualdad... Destacan en estas obras Buero Vallejo, con Historia de una escalera, y El tragaluz (más adelante hablaremos de este autor).

Años 60-Actualidad: Teatro Experimental

Poco a poco la influencia del teatro vanguardista de los años 50 llegó a los escenarios españoles. Hacia mediados de los 60 se produce una amplia renovación dramática que afecta al propio texto y la escenografía. Incluye novedades:

  • El personaje dramático no es un protagonista identificado.
  • La intriga suele estar dispersa o fracturada.
  • Los escenarios se vacían, y el objeto es de carácter simbólico.

Destacan Francisco Nieva y Fernando Arrabal con El cementerio de coches, que es muy abstracto y está lleno de símbolos difíciles de interpretar.

Hay grupos de teatro experimentales que participaron en la inauguración de los JJOO de Barcelona (Els Joglars, Els Comediants y La Fura dels Baus). A partir del 75 se abandona toda la experimentación, y se busca contar historias conocidas para el espectador. Destaca Fernando Fernán Gómez, con Las bicicletas son para el verano.

Antonio Buero Vallejo

Desde pequeño, iba al teatro, al cual lo llevaba su padre. Se mudó a Madrid, donde alternaba las clases con el teatro y la lectura. Fue detenido en 1939 y condenado a muerte. En la cárcel dibujó un retrato de Miguel Hernández, donde también sería inspirado para La Fundación. Entre 1947 y 48 escribió Historia de una escalera, su obra más importante, con la cual ganó el premio Lope de Vega. Durante los 60, consiguió publicar, a pesar de la censura, El tragaluz, Las meninas... Fue nombrado miembro de la RAE y consiguió el premio Cervantes y el premio Nacional de Letras Españolas. Murió en Madrid.

Entradas relacionadas: