Pedagogías de la Resistencia y Mecanismos de Poder: De Simón Rodríguez a Michel Foucault

Visiones Pedagógicas de Simón Rodríguez

Educación Bancaria

Capacidad de compartir relatos entre generaciones, habilitando a las nuevas generaciones un tiempo y un espacio.

Pedagogía Comunitaria

No solo incluye al aula, sino que es la pedagogía de las ciudades, donde los nombres de las calles, subtes y trenes tienen mucho que enseñarnos como ciudad. Es la comunidad que educa y a su vez es educada.

Pedagogía de la Inclusión y Autonomía Productiva

Además de enseñar el castellano o el español, también se enseñaban las lenguas de los pueblos originarios. En las escuelas que iba creando Rodríguez, se enseñaba Quechua y castellano. Pero además, en las mismas escuelas, había fábricas para que los niños y las niñas pudieran trabajar. Se puede decir que en la idea de Rodríguez hay una idea de emancipación o de autonomía productiva.

Es importante distinguir las escuelas del trabajo para el trabajo de las escuelas para el empleo. No se trataba de empleos, sino de ser productores, de ser sujetos creativos.

Pedagogía de la Resistencia

Rodríguez es el comienzo de las pedagogías de la resistencia en América Latina.

Conceptos Clave en la Teoría Social

El Poder según Michel Foucault

El poder, desde la perspectiva propuesta por Michel Foucault, se concibe como una relación social. Se considera que:

“(…) las relaciones de poder múltiples atraviesan, caracterizan, constituyen el cuerpo social; y estas relaciones de poder no pueden disociarse, ni establecerse, ni funcionar sin una producción, una acumulación, una circulación, un funcionamiento del discurso” (Foucault 1979: 139).

Así, el poder no solo reprime y prohíbe, sino que, principalmente, produce relaciones sociales y las reproduce (Foucault 1979: 139).

Es limitada la visión que concibe al poder como un atributo que se concentra en un solo lugar o una persona determinada. Reconocer únicamente la presencia del poder en personas identificadas como “poderosas” o en espacios específicos vinculados con los gobiernos, no permite visibilizar cada uno de los ámbitos sociales en los que los estudiantes se mueven, desenvuelven y socializan, y en los que despliegan sus relaciones de poder.

Vigilancia y Control Organizacional

La vigilancia se refiere al control de las actividades en las organizaciones. Todo el mundo, incluidos quienes están en las posiciones de autoridad más elevadas, está sujeto a vigilancia. La vigilancia adopta dos formas:

1. Control directo: El control directo del trabajo de los subordinados por los superiores, observándolos de manera directa.
2. Control sutil (Archivos): Consiste en mantener archivos, registros e historiales de los empleados. Tales registros se emplean para controlar la conducta de los empleados y para motivar las recomendaciones para el ascenso.

Los individuos situados en los escalones inferiores no aceptan con pasividad la vigilancia. Las personas pueden conseguir examinar sus expedientes y descubrir medios de presionar o alentar a sus superiores para que escriban buenos informes sobre ellos. La creación de “zonas ocultas” lejos del control de vigilancia es un método importante que se emplea para combatir una vigilancia desmedida.

Disciplina y Reglamentación de la Conducta

La vigilancia es importante en las organizaciones modernas por su fuerte conexión con la disciplina: la reglamentación coordinada de la conducta de las personas. Se espera que las personas trabajen asidua y diariamente.

La disciplina se promueve a la vez por el emplazamiento físico de las organizaciones y por el programa preciso proporcionado por horarios detallados. Estos regularizan las actividades a través del espacio y el tiempo. Foucault sostiene que estos mecanismos “distribuyen eficazmente los cuerpos” en los contornos de la organización. Los horarios son la condición de la disciplina organizativa, ya que agrupan las actividades de gran número de personas.

El Proceso de Secularización

La filosofía nace también gracias a que se produjo en Grecia un desplazamiento progresivo de las formas de expresión y cognición religiosas, surgiendo, por tanto, como fruto de un proceso de secularización.

En el debate filosófico, el hecho de la secularización se entiende como el equivalente de la progresiva erosión de los fundamentos teológico-metafísicos que impregnaban toda la realidad cultural de las sociedades antiguas. El desarrollo de la sociedad europea occidental se podría entender como un progresivo proceso de secularización, donde se daría una creciente racionalización y mundialización de la sociedad.