El Petrarquismo: Origen, Características y su Huella en Garcilaso de la Vega

El Petrarquismo y la Obra de Garcilaso de la Vega

El Petrarquismo es un movimiento poético desarrollado en el siglo XVI en las principales tradiciones literarias europeas. En él se inscribe una amplia constelación de poetas que tomó como modelo el cancionero de Petrarca. El eje temático es la pasión amorosa no correspondida del yo poético hacia su amada Laura.

La poesía petrarquista se extendió sucesivamente por Italia (Pietro Bembo), Francia (Pierre Ronsard) y España (Garcilaso de la Vega).

Rasgos del Petrarquismo

Los poetas no pretendieron ser originales, ni presentaron obras totalmente nuevas o singulares. La poesía debía basarse en la imitación, en la recreación de modelos prestigiosos. Debían inspirarse en fuentes diversas, la llamada imitación compuesta. Los petrarquistas españoles imitarán a los poetas latinos, a Petrarca y a los petrarquistas italianos del siglo XVI.

El tema fundamental es la experiencia amorosa, una nueva concepción del amor marcada por el neoplatonismo: la belleza de la amada es para los neoplatónicos un reflejo o proyección de la belleza divina. La temática amorosa está asociada a dos motivos: la mitología grecolatina y la descripción de una naturaleza idealizada, tópico del locus amoenus. La poesía petrarquista incorporó nuevos metros, estrofas y poemas estróficos. Se caracterizó por la naturalidad en la expresión.

Garcilaso de la Vega

Los poemas de Garcilaso fueron publicados póstumamente en 1543 como apéndice de Juan Boscán. Su obra supone la más importante revolución poética de la historia de la literatura española, aunque apenas incluye las siguientes composiciones:

• 38 sonetos y 4 canciones
• La oda Ad florem Gnidi, escrita a imitación del poeta latino Horacio, en la que Garcilaso introduce la lira en la poesía castellana.
• 2 elegías y una epístola.
• 3 églogas de ambientación pastoril.

Los sonetos

El yo poético se identifica con personajes mitológicos. En ellos se exploran distintos matices de la experiencia amorosa, como el dolor. En algunas composiciones, Garcilaso explica el proceso de enamoramiento y la naturaleza del amor siguiendo el modelo del cancionero de Petrarca. Presentan el dolor por la muerte de la amada y el deseo de reencontrarse con ella en el más allá. Algunos sonetos están dedicados a sus amigos, como Boscán.