El positivismo y la metafísica en la filosofía
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La palabra “positivismo” fue empleada por Compte para aludir a su filosofía. La humanidad, según Compte, atravesó varias etapas:
- La teología: (el hombre apelo a agentes sobrenaturales y determina que ellos son los causantes de todo lo que sucede)
- La metafísica: (los dioses son reemplazados por entidades abstractas)
- Finalmente la positiva: (renuncia a buscar el origen y el destino del universo, y a conocer las causas infinitas de los fenómenos, y se atiene únicamente a lo proporcionado por los sentidos y la razón)
“Positivo significa concreto, tangible. Los demás, son fantasmas, y han de ser desechados”
Existe una segunda manifestación al positivismo. Es la corriente del positivismo lógico, también llamado empirismo lógico. Se trata de una consecuencia al pensamiento de Kant que revirtió al movimiento filosófico en su camino hacia el mundo, y tomó la orientación del sujeto mismo y la crítica del conocimiento en tanto facultad: que podemos y que no podemos conocer.
El positivismo lógico no centra su atención en las cosas, si no en el hablar, el decir. La única preocupación de los positivistas lógicos era el lenguaje. Las verdades se expresan en palabras. Los ideales toman forma de palabra. Incluso quien dice “todo es materia” está expresando sonidos, sonidos que se anudan en palabras, palabras que se unen en una proposición. El empirismo lógico se ocupa de desligar las oraciones con sentido de aquellas sin sentido.
El tema de Dios ha permanecido vigente en la historia del pensamiento humano desde tiempos remotos hasta el día de hoy y sin embargo resulta difícil para la gente ponerse de acuerdo en qué significa Dios, hallar un significado común para todos. Wittgenstein dice que para discutir algo deberíamos ponernos de acuerdo previamente en la definición de ese algo. Y si no concordamos en la definición, cada uno está hablando de cosas distintas. Entonces, es mejor callar.
Centenares de años destinados a discutir temas de metafísica representaron un enorme esfuerzo, que fue inútil. Se han discutido palabras que no se referían a ningún objeto que pueda ser señalado. Cada palabra era explicada con otra palabra o por medio de distintas frases, o respondía a una imagen o sentimiento subjetivo. El objetivo de verificación nunca aparecía.