Procesos geológicos: Erosión, Transporte y Sedimentación
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Erosión
Las rocas meteorizadas pueden sufrir erosión.
La erosión es el proceso de desprendimiento y retirada de fragmentos de las rocas.
La intensidad de la erosión depende principalmente de dos factores:
Energía del agente erosivo
Cuanto mayores son la densidad y la velocidad de los flujos de aire, agua o hielo que actúan sobre la superficie de las rocas, mayor es la erosión causada. En el curso alto de un río, el agua fluye a gran velocidad y es capaz de erosionar las rocas del lecho con gran eficacia
Naturaleza de las rocas
Las naturaleza de las rocas determina su dureza y su resistencia a la erosión. En general, las rocas sedimentarias son más sensibles a la erosión que las rocas ígneas y metamórficas.
Transporte
El transporte es el traslado de los materiales erosionados, desde el lugar en el que se originan al lugar en el que se acumulan.
La distancia a la que los materiales erosionados son transportados depende de la energía del agente geológico y del peso y el tamaño de los fragmentos.
Transporte por el fondo
Este tipo de transporte tiene lugar cuando el viento y especialmente el agua impulsan los detritos sin separarlos de la superficie terrestre, arrastrándolos o haciéndolos rodar. Es así como se transportan los fragmentos de roca más grandes y pesados, mientras que aquellos de peso y tamaño intermedios se desplazan realizando saltos.
Transporte en suspensión
Se produce cuando el agua o el viento separan los fragmentos de roca de la superficie terrestre. Los fragmentos más pequeños y ligeros pueden permanecer suspendidos durante largos períodos.
Durante el transporte, los materiales transportados se ven expuestos a una erosión adicional, al rozar o impactar con las rocas que encuentran a su paso. Al mismo tiempo, estas rocas son también meteorizadas y erosionadas.
Sedimentación
La sedimentación es el proceso por el que los materiales transportados son depositados en un lugar donde tienden a acumularse.
Los materiales transportados sedimentan cuando el agente geológico que los transportaba no tiene suficiente energía para seguir desplazándolos.
Los materiales depositados reciben entonces el nombre de sedimentos. Cuando un agente geológico deposita los materiales que transporta, es habitual que otro agente —o el mismo en otras condiciones— los vuelva a poner en movimiento.
Las zonas de los continentes y los fondos oceánicos donde tienden a acumularse sedimentos se denominan ambientes sedimentarios.