Protocolo de Manejo y Clasificación de Traumatismos Maxilofaciales en el Deporte

Clasificado en Deporte y Educación Física

Escrito el en español con un tamaño de 5,3 KB

Traumatismos Maxilofaciales: Etiología y Epidemiología

Causas Comunes de Trauma Maxilofacial

Los traumatismos maxilofaciales son el resultado de diversas situaciones de alto impacto:

  • Accidentes de tráfico.
  • Accidentes laborales.
  • Lesiones deportivas.
  • Peleas con violencia física.
  • Accidentes domésticos.
  • Caídas casuales en la vía pública.

Epidemiología

Se observa una mayor incidencia en varones (aproximadamente el 68%) y suelen presentarse con mayor frecuencia durante la tercera década de la vida.

Anatomía del Cráneo y el Macizo Facial

Bóveda Craneal

La bóveda craneal está compuesta por los siguientes huesos:

  • Hueso frontal.
  • Hueso parietal.
  • Hueso temporal.
  • Hueso occipital.
  • Hueso esfenoides.
  • Hueso etmoides.

Macizo Facial

El macizo facial (o esqueleto facial) incluye:

  • Hueso nasal.
  • Hueso lacrimal.
  • Hueso cigomático.
  • Maxilar superior.
  • Hueso palatino.
  • Hueso vómer.
  • Cornete inferior.

(Nota: La mandíbula no se considera parte del macizo facial superior).

Manejo Inicial del Paciente con Trauma Maxilofacial

El tratamiento inicial (TTO) sigue el protocolo de trauma, priorizando la estabilidad del paciente:

  1. Mantenimiento de la vía aérea y control de la columna cervical.
  2. Respiración y ventilación adecuadas.
  3. Circulación y control de hemorragias.
  4. Evaluación neurológica (Escala de Glasgow).
  5. Exposición completa del paciente.

Signos de Fractura de la Base del Cráneo

Ciertos signos clínicos sugieren una fractura de la base del cráneo, lo cual requiere atención inmediata:

  • Hematomas detrás de la oreja (conocido como Signo de Battle).
  • Hemotímpano: Presencia de sangre detrás de la membrana del tímpano.

Objetivos del Tratamiento de Fracturas Faciales

El tratamiento quirúrgico y de rehabilitación busca alcanzar los siguientes objetivos funcionales y estéticos:

  • Lograr el mayor grado de rehabilitación posible.
  • Promover una rápida regeneración ósea.
  • Recuperación de las funciones ocular, masticatoria y nasal.
  • Restaurar la fonación.
  • Mejorar la estética facial.
  • Mantener un adecuado estado nutricional del paciente.

Técnicas de Reducción y Fijación

Reducción de la Fractura

La reducción implica alinear los fragmentos óseos, especialmente en los huesos portadores de dientes o prótesis, estableciendo la relación oclusal previa del paciente.

Fijación Intermaxilar (FIM)

La Fijación Intermaxilar (FIM) es el establecimiento de una relación oclusal correcta mediante la unión de los dientes de ambos maxilares con alambre o barras de fijación.

Fijación Rígida o Interna

La técnica de fijación rígida o interna utiliza placas y tornillos y, generalmente, no precisa de FIM.

Consideraciones Específicas para Fracturas Condilares

  • Fracturas condilares con desplazamiento mínimo: Se pueden tratar conservadoramente con FIM.
  • Fracturas condilares con desplazamiento anatómico: Requieren reducción abierta y fijación rígida.

Fracturas de Mandíbula

Debido a su prominencia, posición y configuración anatómica, la mandíbula es uno de los huesos faciales que, junto con el malar y los huesos propios nasales, más se fractura. Posee una consistencia dura.

Zonas de Debilidad Mandibular

La mandíbula presenta tres zonas anatómicas especialmente vulnerables a la fractura:

  • Cuello del cóndilo mandibular.
  • Ángulo mandibular.
  • Región parasinfisaria.

Clasificación de las Fracturas Mandibulares

Las fracturas se clasifican según el patrón de ruptura:

  • Tallo verde: Fractura incompleta, típica en hueso flexible (niños).
  • Simple: Sección completa del hueso con fragmentación mínima en la zona.
  • Conminutas: El hueso queda dividido en muchos fragmentos.
  • Compuesta: Existe comunicación del margen del hueso con el exterior o con una cavidad interior (como un seno).

Factores de Desplazamiento

El desplazamiento de los fragmentos de la fractura está determinado por la dirección de la línea de fractura y la tracción muscular:

  • Favorable: La línea de fractura y la tracción muscular se resisten al desplazamiento.
  • Desfavorable: La tracción muscular provoca el desplazamiento de los fragmentos.

Entradas relacionadas: