El Realismo Literario en el Siglo XIX: Autores, Obras y Características Clave

El Realismo Literario en el Siglo XIX: Un Retrato Fiel de la Sociedad

El realismo fue una corriente literaria que se propuso representar la realidad con fidelidad y verosimilitud. La novela fue el género que adquirió mayor desarrollo en toda Europa a partir de mediados del siglo XIX.

El Realismo en Europa

Francia: Cuna del Realismo y Naturalismo

Se inició en Francia con autores como Balzac (cuya Comedia humana nos muestra un fresco de la sociedad francesa del momento), Stendhal (con La cartuja de Parma) y Flaubert (con Madame Bovary, donde nos narra las aventuras amorosas de una mujer casada). Posteriormente, Zola fue el creador de una nueva corriente literaria, el Naturalismo.

Inglaterra: La Crítica Social de Dickens

En Inglaterra, el realismo triunfa con Dickens, autor que refleja en obras como David Copperfield y Grandes esperanzas las malas condiciones de vida de la clase obrera durante la Revolución Industrial.

Rusia: Profundidad Psicológica y Social

En Rusia, destacan Dostoyevski (con Crimen y castigo) y Tolstói (con Guerra y paz).

El Realismo en España: Contexto y Autores Clave

En España, el realismo se inicia con la publicación de La fontana de oro de Galdós y se desarrolla a partir de 1880, en el marco histórico de la Primera República y la Restauración. Esta mejora de las condiciones materiales potenció el crecimiento de las ciudades y el desarrollo de una burguesía urbana que contrastaba con las masas populares pobres e incultas.

Las corrientes de pensamiento más relevantes de la época fueron el Positivismo y el Krausismo, que influyeron en la creación de la Institución Libre de Enseñanza, clave en la formación de un nuevo intelecto.

Principales Novelistas Realistas Españoles

• José M.ª de Pereda: Añoraba una sociedad agraria y tradicional, representada en su novela Peñas arriba.
• Juan Valera: Con una prosa entretenida y ágil, escribió novelas como Pepita Jiménez o Juanita la Larga.
• Emilia Pardo Bazán: De ideología conservadora, fue precursora del feminismo en obras como Los Pazos de Ulloa.
• Leopoldo Alas, «Clarín»: Defendió una modernización de España y criticó a los sectores más conservadores. Fue uno de los intelectuales más respetados de su época e influyó en los escritores de su generación. En su obra encontramos cuentos como Adiós, Cordera o novelas como Su único hijo, pero sobre todo La Regenta. Esta novela, ambientada en Oviedo, donde Clarín hace un retrato pormenorizado de una ciudad de provincias que representa a toda la sociedad española, realiza una crítica llena de ironía a los diferentes estamentos de la sociedad. Todos ellos crean una sociedad opresora con la que choca la protagonista, que acabará vencida y marginada. En La Regenta adquieren importancia las descripciones de la psicología de los personajes y de los ambientes, así como la ironía con la que critica.

Características de la Novela Realista

El desarrollo de la prensa contribuyó a la difusión de las ideas literarias del siglo XIX, así como a la publicación de novelas por entregas y de artículos de los autores. Las características principales de la novela realista son:

• Descripciones minuciosas: De lugares, seres y objetos, para las que se valen de la observación y la documentación.
• Léxico variado: Utilizan variedades sociales y geográficas para caracterizar mejor a los personajes.
• Narrador omnisciente: Respeta la temporalidad cronológica, usa la primera o la tercera persona, e interviene y enjuicia a los seres y los hechos con intención irónica o moralizante. Se vale del diálogo y el monólogo interior, entre otras técnicas narrativas.
• Temas sociales: Aparece el conflicto entre individuo y sociedad, o el contraste entre situaciones vitales y personajes que transmiten diversos valores y visiones del mundo.

Benito Pérez Galdós: El Gran Cronista del Siglo XIX Español

Autor de una extensa obra, Benito Pérez Galdós escribió 46 relatos, los Episodios Nacionales, que constituyen la crónica de los acontecimientos históricos más importantes de la España del siglo XIX, desde la Batalla de Trafalgar hasta la Restauración.

En cuanto a sus novelas, se pueden clasificar en varios grupos:

• Primera época o novelas de tesis: Tratan conflictos ideológicos entre la religión y las actitudes anticlericales. Ejemplos: La fontana de oro, Doña Perfecta y Marianela.
• Novelas contemporáneas: Reflejan la realidad social y política de la época a través de personajes de distintas clases sociales. Ejemplos: La desheredada, Fortunata y Jacinta, Miau y Tormento. En estas obras, Galdós perfecciona las técnicas narrativas en cuanto a los diálogos, el monólogo interior, el uso de la ironía, etc.
• Novelas espirituales: Representan el predominio de los valores de amor y caridad cristiana, manifestando la desilusión ideológica de Galdós ante el fracaso de una clase política. Ejemplos: Nazarín y Misericordia.