Reflexiones Filosóficas sobre el Ser Humano: Pascal, Filloux y Aristóteles

Pascal

“El hombre no es más que una caña (un junco), la más débil de la naturaleza, pero es una caña pensante. No es necesario que el universo entero se arme para aplastarlo: un vapor, una gota de agua basta para matarlo. Pero, aunque el universo lo aplastara, el hombre sería aún más noble que aquello que lo mata, porque él sabe que muere y conoce la ventaja que el universo tiene sobre él. El universo no sabe nada”.

Este texto de Pascal habla sobre la aparente debilidad que tiene el hombre, comparándolo con una caña o junco: débil, pero pensante. Hace referencia a que el hombre es un ser pensante. Aunque basta una gota de agua o un vapor para matarlo (como al junco), su grandeza reside en su conciencia. Pascal sugiere que el hombre sabe adaptarse a la situación porque, de nuevo, es un ser pensante.

Basta poner de ejemplo a los juncos frente a los árboles: durante una tormenta, los juncos pueden doblarse hasta estar totalmente apoyados contra el suelo, pero al terminar la tormenta, con el tiempo, vuelven a su forma natural. Los árboles, aunque resistentes en ciertas condiciones climáticas, pueden ser derribados por fuertes vientos. Esto ilustra cómo el junco se adapta a la situación, al igual que el hombre, según esta analogía.

Filloux: Definición de Personalidad

Para Filloux, la personalidad es:

1. Una configuración: Es una estructura organizada donde todo está íntimamente relacionado y siguen ciertos patrones. No es una suma de elementos aislados. Incluye tanto lo físico como lo psíquico y es una estructura dinámica, en continuo proceso de desarrollo y cambio, que culmina con la muerte.
2. Única: Cada individuo se vincula de manera diferente e irrepetible. Así como no hay dos huellas dactilares iguales, no hay dos personalidades iguales.
3. Temporal: Se forma a lo largo de la historia de un individuo. Cada uno tiene un pasado, presente y futuro. La historia individual es lo que va formando la personalidad, comenzando desde la concepción o el nacimiento.
4. Responsable de la conducta: La personalidad se manifiesta como un estilo de vida a través de la conducta. Conducta y personalidad son dos términos intrínsecamente unidos; no hay personalidad sin conducta y viceversa.

Aristóteles

Aristóteles define al hombre como un animal racional (que tiene logos). Sostiene que el hombre es el ser más inteligente en parte porque tiene manos, un elemento fundamental para el intelecto humano, que le permite aprender y manejar herramientas y su entorno.

La relación mano-cerebro no depende solo de su existencia, sino también de la amplitud de la superficie cerebral adaptativa. Según esta visión, una mayor superficie cerebral se correlaciona con la presencia y habilidad de las manos.

En resumen: la inteligencia, para Aristóteles, requiere manos.