Reformas, Desafíos y Fin de la Primera República Española (1873-1874)
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La Primera República Española: Un Breve Periodo de Reformas y Conflictos (1873-1874)
La Primera República Española, proclamada en 1873, se propuso una ambiciosa tarea reformadora. Se elaboró un proyecto de constitución con derechos y libertades similares a la Constitución de 1869. La principal novedad fue la estructura federal del Estado, con 17 estados regionales (incluyendo Cuba). El poder se dividiría en tres niveles: municipios, estado regional y estado federal.
Reformas y Legislación
Además de la estructura federal, se impulsaron otras reformas clave:
- Separación de la Iglesia y el Estado.
- Amplia legislación social.
- Restauración de la disciplina del ejército.
- Supresión de las quintas (servicio militar obligatorio).
Desafíos y Conflictos Internos
La implementación de estas reformas se vio obstaculizada por la corta duración del régimen y diversos problemas:
- Guerra de Cuba: Se prolongó debido a las medidas propuestas por el gobierno republicano, aunque no llegaron a aplicarse por la oposición de las autoridades españolas en la isla.
- Tercera Guerra Carlista: Conflicto armado con los partidarios del pretendiente carlista al trono.
- Inestabilidad social: Continuas protestas en el campo y las ciudades.
- Levantamiento cantonal: El problema más grave. Protagonizado por federalistas intransigentes y radicales del movimiento obrero, se extendió por el arco mediterráneo y zonas próximas.
La Crisis del Cantonalismo y Cambios de Gobierno
Ante la situación del levantamiento cantonal, Pi y Margall, presidente del poder ejecutivo, intentó negociar con algunos cantones, como el de Málaga, con éxito. Sin embargo, la conflictividad persistió, especialmente en Cartagena. Pi y Margall se negó a usar el ejército y dimitió.
Le sucedió Salmerón, quien recurrió al ejército para sofocar el levantamiento. No obstante, se negó a firmar las penas de muerte impuestas a los líderes cantonalistas y también dimitió. Castelar, republicano unionista y más conservador, asumió la presidencia el 13 de septiembre de 1873, marcando un giro a la derecha de la República.
El Gobierno Autoritario de Castelar y el Golpe de Estado de Pavía
Castelar obtuvo poderes extraordinarios de las Cortes y gobernó de forma autoritaria, otorgando gran poder al ejército. Esto generó descontento entre los republicanos federalistas, que presentaron una moción de censura. El 3 de enero de 1874, Castelar fue derrotado en el Parlamento. Ante esta situación, el general Pavía dio un golpe de Estado, disolviendo las Cortes.
Se formó un gobierno provisional liderado por Serrano, apoyado por unionistas y progresistas, con el objetivo de establecer una república moderada. Sin embargo, esta opción fracasó debido al apoyo de las élites al retorno de los Borbones.
La Restauración Borbónica
Paralelamente, Cánovas del Castillo organizó el regreso al poder de los Borbones en la figura del príncipe Alfonso. Isabel II renunció al trono en favor de su hijo, quien se dirigió a la nación mediante el Manifiesto de Sandhurst, ofreciéndose como rey y prometiendo pacificación, orden, estabilidad y unión con la Iglesia.
Aunque Cánovas planeaba una proclamación real por parte de las Cortes, el general Martínez Campos se adelantó con un golpe de Estado en Sagunto el 29 de diciembre de 1874, proclamando a Alfonso XII como rey. Este evento marcó el fin de la Primera República y el inicio de la Restauración Borbónica.
Conclusión
El Sexenio Democrático, y en particular la Primera República, representó el primer intento, aunque fallido, de que las clases medias y bajas accedieran al poder político en España.