Retroalimentación y Comunicación Bidireccional: Claves en las Relaciones Públicas
La Retroalimentación desde la Perspectiva de la Comunicación Bidireccional
Una manera de reflexionar sobre el concepto de retroalimentación es a través de la comunicación bidireccional. La comunicación unidireccional (del emisor al receptor) solo sirve para difundir la información y eso es siempre menos eficaz que la comunicación bidireccional que establece diálogo entre emisor y receptor.
La Comunicación Bidireccional Simétrica según Grunig
Grunig va todavía más allá y postula que en el desarrollo ideal de las Relaciones Públicas (RRPP), la comunicación debería ser bidireccional y simétrica. Es decir, que la comunicación entre emisor y receptor fuera equilibrada. Afirma que en un modelo simétrico, la comprensión y no la persuasión, es el objetivo principal de las RRPP. El principal problema es que cuando se utilizan los medios de comunicación social, la distancia psicológica entre emisor y receptor se amplía considerablemente con respecto a otras comunicaciones, como podrían ser el cara a cara o las reuniones.
La comunicación es más complicada porque el público ya no se implica con la fuente. Además, en principio, la retroalimentación no es inmediata, y el mensaje puede verse distorsionado en la medida en que es filtrado por los medios de comunicación.
En los modelos de comunicación se resalta la importancia de la retroalimentación como elemento inherente al proceso. A medida que se van implantando estrategias de comunicación, los profesionales de las RRPP deben prestar mayor atención a la retroalimentación.
La Persuasión en las Relaciones Públicas
La persuasión es la actividad o proceso por la que un comunicador intenta inducir un cambio en las creencias, actitudes o comportamientos de otra persona o grupo de personas. El comunicador transmite un mensaje en un contexto en el que el persuadido tiene cierta libertad de elección. Esta definición es coherente con el papel de las RRPP en el momento actual. La persuasión se suele aplicar para:
- Cambiar o neutralizar opiniones hostiles.
- Cristalizar opiniones latentes y actitudes positivas.
- Conservar opiniones favorables.
- Mantener la reserva de reputación de la organización o RRPP preventivas (a largo plazo).