La Revelación de Dios en la Historia: Atributos, Unidad y Misterio de la Trinidad

El Dios Vivo de la Historia

¿Quién es Dios?

Con la palabra ‘Dios’ expresamos “la realidad primera y original de todo lo bueno y bello que existe, la inteligencia y el amor supremo” (CE p. 108); “la plenitud del Ser y de toda perfección, sin origen y sin fin. Mientras todas las criaturas han recibido de Él todo su ser y su poseer, Él solo es su Ser mismo y es por sí mismo todo lo que es” (CIC 213).

Con la palabra ‘Dios’ confesamos al Dios vivo de la historia que se ha revelado en los acontecimientos de Israel y de Jesucristo y que nos manifiesta la Escritura:

• El Dios que es guía, roca y escudo (cf. Gen 15,1; Sal 28,1; 71,3);
• Que habla y dialoga con el ser humano (cf. Gen 12,1-2);
• Que escoge y llama a Israel por puro amor (para unirlo a Él en Alianza).

Es un Dios que se interesa por la vida, un Dios que libera y guía, un Dios que interviene en la historia y abre camino a una nueva historia. Es un Dios de esperanza.

¿Cómo es Dios?

El Dios vivo de la Historia es el Único Dios: Dios es Único; no hay Dios fuera de Él. Así lo expresa la fe de Israel.

Importancia práctica de esta profesión de fe

Esta profesión de fe tiene gran importancia práctica:

• Solo Dios es Dios, Señor y dueño del Universo y de la Historia; por lo tanto, Él es el fundamento seguro y el último sentido de todo. Ningún hombre (que se pudiera divinizar) tiene poder sobre nosotros o puede pretender ser dios; no estamos sometidos a ninguna fuerza ciega (destino, magia, luz, energía…) caótica y confusa.
• Es fuente de libertad y de fraternidad.

Atributos de Dios: Liberador, Santo y Justo

Dios es liberador, santo y justo.

Liberador (goel)

Quien defiende y tutela los derechos de todos, especialmente de los pobres. El Dios liberador es el que defiende al débil y desvalido, rescata al oprimido y esclavizado y tutela la dignidad del pobre.

Santo (qadosh)

Fuera de serie; trascendente, pleno, luz sin sombras. La santidad de Dios es la plenitud de su vida y de su amor; es la plenitud de su Ser: armonía, sentido, vida, amor, libertad, perfección. Por eso Dios es aclamado “Santo, Santo, Santo es el Señor” (Is 6,3; Ap 4,8). Dios manifiesta su santidad liberando y santificando a los suyos: rescatando de la opresión, de la injusticia, de la esclavitud, del pecado, del mal y de la muerte; y colmando de su plenitud.

Justo (sedaqah)

Dios cumple lo que dice. Dios no acepta la injusticia.

Dios es Amor: El Misterio de la Trinidad

Dios se ha revelado como amor: amor hacia sus criaturas, especialmente hacia el ser humano; y amor en su mismo ser íntimo: comunión de las tres Divinas Personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo.

El Dios Único y vivo, revelado progresivamente en la historia del pueblo de Israel, se nos ha dado a conocer en la historia de Jesucristo como Hogar, Familia y Comunión de Personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo.

Unidad y Originalidad en la Comunión Divina

En esta Comunión divina se dan a la vez la perfecta unidad (un solo Dios) y la perfecta originalidad (tres Personas divinas).

La unidad no mata la originalidad, la identidad, lo propio del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. La originalidad de cada Persona divina no rompe la Unidad de los Tres, la Unidad de un solo Dios. Aquí hay verdadera Comunión, Hogar, Relación, Unidad y Amor.

El Misterio Santo de Dios que se nos ha revelado en Jesucristo es la armonía de la unidad-comunión y de la originalidad-singularidad. La unidad de la comunión evita toda división, y la originalidad de las personas evita toda uniformidad.

La Trinidad como Modelo de Sociedad

La Santa Trinidad realiza el deseo más hondo de comunión que existe en el ser humano: una comunión sin divisiones donde no se pierde, sino que se integra la originalidad de cada uno; una diversidad sin uniformidad donde no se daña la unidad y la comunión profunda. Por ello, la Trinidad es el modelo de la familia, de la Iglesia y de la Sociedad. Dios Uno y Trino es el modelo para construir una familia, una Iglesia y una Sociedad nueva y digna.