Romanticismo y Barroco en las Letras Españolas: Espronceda, Bécquer, Góngora y Quevedo
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El Romanticismo: Orígenes, Características y Figuras Clave
Contexto y Elementos Desencadenantes del Romanticismo
La aparición del Romanticismo fue impulsada por diversos factores:
- Influencia de las nuevas corrientes filosóficas, con un marcado énfasis en el espíritu y la emoción por encima de la razón.
- Agotamiento artístico y de las formas del período neoclásico.
- La convulsa situación política y social de Europa a finales del siglo XVIII y principios del XIX.
- El triunfo de la Revolución Francesa, que promovió la idea de que el individuo puede luchar por su libertad y contra los sistemas absolutistas.
- El auge y triunfo de los movimientos prerrománticos, que anticiparon muchos de sus temas y sensibilidades.
Rasgos Fundamentales del Movimiento Romántico
El Romanticismo se caracteriza por una serie de rasgos distintivos:
- Preponderancia del sentimiento sobre la razón: Se exalta la emoción, la pasión y la intuición.
- Extremado subjetivismo: El yo individual se convierte en el centro de la creación artística, expresando vivencias personales e íntimas.
- Afán de rebeldía: Contra las normas sociales, políticas y artísticas establecidas.
- Deseo de evasión: Manifestado en diversas formas:
- El suicidio como escape trágico.
- La fuga hacia lugares exóticos y lejanos, idealizados.
- La revalorización y exploración de la Edad Media, vista como una época de mayor autenticidad y espiritualidad.
- Nacionalismo y exaltación del pasado: Se busca la identidad nacional en la historia, las tradiciones y el folclore, como reivindicación patriótica.
- Renovación temática y formal: Se exploran nuevos temas, escenarios, tópicos y técnicas literarias, rompiendo con los moldes clásicos.
- Gusto por ambientes conmovedores: Se prefieren escenarios que provoquen emociones intensas en el lector (ruinas, cementerios, paisajes nocturnos). La naturaleza se convierte en un símbolo de los estados anímicos del autor.
- Simpatía por personajes desarraigados y marginales: Héroes rebeldes, piratas, mendigos, proscritos, que encarnan la libertad y el conflicto con la sociedad.
- Mezcla de géneros y tonos: Se rompen las barreras entre lo trágico y lo cómico, lo sublime y lo grotesco.
- Renovación lingüística: Se busca un lenguaje más expresivo y colorista.
- Rehabilitación de vocablos arcaicos y expresiones populares.
- Profusión de sustantivos que denotan estados de ánimo y gusto por las palabras esdrújulas.
Autores Románticos Destacados
José de Espronceda (1808-1842): Pasión y Rebeldía
Biografía y Personalidad
Nacido en 1808 y fallecido en 1842, José de Espronceda fue una figura emblemática del Romanticismo español. Su vinculación con grupos ultraliberales lo llevó al exilio en Lisboa y Londres a partir de 1827. Se caracterizó por ser antiburgués, inconformista, impulsivo y apasionado. Conocido como un gran seductor, también destacó por su generosidad, sinceridad y honradez.
Características Literarias
- Sinceridad en la expresión de sus sentimientos.
- Transiciones abruptas de la pasión a la ternura.
- Abundancia de adjetivos, exclamaciones e interrogaciones retóricas.
- Tendencia al uso de palabras esdrújulas.
- Empleo de estrofas y métricas muy diversas, buscando la musicalidad y el ritmo.
Gustavo Adolfo Bécquer (1836-1870): Intimismo y Poesía Pura
Temática Central de sus Rimas
La obra poética de Gustavo Adolfo Bécquer, sus célebres Rimas, se suele estructurar temáticamente, según la edición de sus amigos publicada póstumamente, de la siguiente manera (numeración referencial):
- Rimas I-XI: Reflexiones sobre la poesía, la inspiración y el proceso de creación poética.
- Rimas XII-XXIX: El amor correspondido, la plenitud, la ilusión y la exaltación del sentimiento amoroso.
- Rimas XXX-LI: El desamor, el desengaño, el dolor y la melancolía provocados por la pérdida o la traición amorosa.
- Rimas LII-LXXIV: La soledad, la angustia existencial, la proximidad de la muerte y la reflexión sobre el más allá.
El Barroco Español: Culteranismo y Conceptismo a Través de sus Maestros
Luis de Góngora y Argote (1561-1627): El Ingenio del Culteranismo
Vida y Contexto
Luis de Góngora y Argote (1561-1627) nació en Córdoba en el seno de una familia acomodada. Fue ordenado sacerdote y posteriormente nombrado capellán real de Felipe III en 1617, cargo que ostentó hasta 1626, cuando cayó gravemente enfermo y regresó a Córdoba, donde falleció.
Estilo Culteranista y Etapas Creativas
Góngora es el máximo exponente del culteranismo (también llamado gongorismo), una corriente literaria del Barroco que se caracteriza por la complejidad formal, la búsqueda de la belleza sensorial y el uso de un lenguaje culto y elaborado, a menudo de difícil comprensión para el lector no iniciado. Se preocupa más por la forma que por el fondo. Su producción literaria se suele dividir en dos grandes etapas o vertientes:
- Una primera etapa o vertiente más accesible, con poemas de corte popular y tradicional (romances, letrillas), caracterizados por su gracia y menor complicación léxica.
- Una segunda etapa o vertiente de poesía extremadamente culta, hermética y, en ocasiones, de difícil comprensión (sonetos, la Fábula de Polifemo y Galatea, las Soledades). Esta poesía, destinada a un público minoritario y culto, se distingue por:
- El uso extremo del hipérbaton (alteración violenta del orden sintáctico habitual de la frase).
- Creaciones léxicas audaces (abundancia de cultismos y neologismos).
- Metáforas complejas, brillantes y sorprendentes, y un profuso uso de la mitología clásica.
Francisco de Quevedo (1580-1645): La Agudeza del Conceptismo
Trayectoria Vital y Carácter
Francisco de Quevedo y Villegas nació en Madrid en 1580, en el seno de una familia noble vinculada a la corte. Realizó sus estudios en el Colegio Imperial de los jesuitas, y posteriormente en las universidades de Alcalá de Henares y Valladolid. Su vida estuvo marcada por su intensa actividad política, sus polémicas literarias y personales, y diversos períodos de destierro y encarcelamiento. Sufrió destierro en la Torre de Juan Abad. Felipe IV lo perdonó, levantándole el castigo, lo que le permitió regresar a la corte y ocupar altos cargos. Sin embargo, en 1639 fue nuevamente encarcelado, presuntamente a causa de un memorial o poema crítico con la política del Conde-Duque de Olivares. Falleció en 1645 en Villanueva de los Infantes, poco después de ser liberado de su prisión en el convento de San Marcos (León). Quevedo fue un hombre de extremos, lleno de paradojas: profundo moralista y satírico implacable, erudito y pendenciero. No dudó en satirizar mordazmente a numerosas figuras de su tiempo, tanto en el plano moral como en el físico. Se le conoció también por su afición a las mujeres y al vino.
El Estilo Conceptista
Quevedo es el principal representante del conceptismo, otra vertiente del Barroco español que, a diferencia del culteranismo, se enfoca en la agudeza del ingenio, la concisión expresiva y la profundidad del pensamiento, más que en el ornato formal. Sus rasgos estilísticos más notables incluyen:
- Condensación del pensamiento: Búsqueda de la máxima significación con el mínimo de palabras, eliminando todo aquello que es superfluo. Se valora la sentencia breve e ingeniosa.
- Comparaciones y metáforas originales: Uso abundante y sorprendente de metáforas, símiles y alegorías, a menudo degradantes o burlescas.
- Figuras retóricas basadas en el contraste y la asociación ingeniosa: Antítesis, paradojas, oxímoron, hipérboles.
- Juegos de palabras: Uso magistral de dilogías (doble sentido), paranomasias (uso de palabras de sonido similar pero significado diferente), calambures, retruécanos y otras formas de ingenio verbal.