Sistemas de Detección de Intrusos: Interior y Exterior
Clasificado en Electrónica
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El detector es un dispositivo capaz de captar vibraciones o variaciones provocadas por la presencia de intrusos que modifican los parámetros de seguridad, generando una señal como consecuencia de dicha modificación. Los detectores se pueden clasificar, según su uso, para interior y para exterior.
Detectores para Interior
Son dispositivos que, colocados para proteger ciertas zonas en el interior de edificios o instalaciones donde hay riesgo de intrusión, informan a la central de todas las variaciones de estado del ambiente que están protegiendo. Es decir, tienen la misión de señalar la intrusión de personas en el local protegido.
Pueden ser periféricos y volumétricos.
Periféricos o de Detección Puntual o Perimétrica
Son los utilizados para cubrir una zona determinada como la totalidad del perímetro del recinto. Estos detectores pueden ser:
Detectores electrónicos de rotura de cristal:
Han sido desarrollados según dos tendencias principales:
- Los que tratan de captar la gama de frecuencias características del rayado o la rotura del cristal (método pasivo). Este sistema utiliza normalmente un micrófono piezocerámico adosado al cristal, capaz de captar las vibraciones que se originan en el mismo a raíz de un impacto, rayado o rotura, transformándolas en impulsos eléctricos.
- Los que pretenden evaluar el efecto que la rotura provoca sobre una señal determinada, que se transmite permanentemente a través del cristal (método activo). Este sistema prevé el empleo de un dispositivo emisor y otro receptor, adosados al cristal.
Detectores Sísmicos:
Son dispositivos que detectan vibraciones generadas por las herramientas de ataque más comunes como: reto percutoras, sopletes, lanzas, etc.
Contactos electromagnéticos:
Se aplican para la protección de puertas o ventanas. Se componen de dos elementos: un imán colocado en la puerta y una chapa metálica de contacto en el marco de la misma, de forma que contacten ambas piezas, generando así un campo magnético. Si se produce la separación de dichos elementos, se anula la acción del campo y se genera la señal de alarma.