Teatro Español de Posguerra: Compromiso, Censura y las Visiones de Sastre y Buero Vallejo
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El Teatro Español de Posguerra: Alfonso Sastre y Antonio Buero Vallejo
El panorama teatral español de posguerra estuvo marcado por dos figuras centrales y sus respectivas corrientes: Antonio Buero Vallejo con el posibilismo y Alfonso Sastre con el imposibilismo. La tendencia predominante en los años 60 se denomina Generación Realista, un teatro crítico que aborda temas muy concretos como la deshumanización y la esclavitud del trabajador. Un ejemplo destacado de esta corriente es La Camisa de Lauro Olmo.
Alfonso Sastre: El Teatro Radical y el Imposibilismo
Alfonso Sastre optó por un teatro radical, expresándose en círculos muy cerrados debido a la dificultad de hacerlo por la censura. Su teatro se basa en la transformación de la sociedad. Ha combatido el teatro burgués, evolucionando desde lo social hasta lo revolucionario.
Obras y Temáticas de Sastre
De su etapa existencial destaca Escuadra hacia la muerte, una obra que fue prohibida. Sus temas principales son:
- La opresión
- La rebelión
- La culpa
A partir de 1954, su obra se vuelve más política y radical. Busca otros moldes expresivos; a las nuevas obras las llama tragedias complejas, con empleo del humor en múltiples cuadros. Ejemplos notables son El banquete y La taberna fantástica.
Desde los años 80 hasta 2007, Sastre vivió en el País Vasco, y fue allí donde consiguió su mayor éxito: Los últimos días de Emmanuel Kant contados por E.T.A. Hoffman. Recibió el Premio Nacional de Teatro en dos ocasiones y el Premio Max de Honor en 2003.
Antonio Buero Vallejo: Compromiso Social, Ético y el Posibilismo
Claves Ideológicas de Buero Vallejo: Compromiso Social y Ético
El teatro de Buero Vallejo refleja un profundo compromiso social y una aguda crítica social. En su ensayo La tragedia, precisó el concepto de tragedia y propuso una mirada lúcida sobre el hombre y el mundo con el objetivo de inquietar y curar.
El dramaturgo plantea problemas sin soluciones, invitando al público a reflexionar y a implicarse éticamente. Pretende una superación ética personal por medio de la reflexión y la lucha contra las fuerzas que se oponen al desarrollo de la dignidad humana. Existe un compromiso ético que invita a superar el pesimismo, lo que supone una llamada a la esperanza en un mundo más justo y fraterno.
Dimensiones de su Obra
La obra de Buero Vallejo se articula en torno a dos planos fundamentales:
- Plano existencial: Meditaciones sobre la vida, donde se entretejen ilusiones, fracasos, soledad, etc.
- Plano social y político (crítica social): Denuncia las iniquidades e injusticias que atañen a la sociedad. El dramaturgo intenta provocar en el espectador una inquietud que le permita avanzar hacia la libertad.
Buero combinó el realismo simbólico con el drama histórico para revisar críticamente la situación social y política.
La Polémica Sastre-Buero y el Legado de Buero Vallejo
Mantuvo una célebre polémica con Sastre. Para Sastre, el teatro debía ser combativo, un espacio en el que el autor se expresara libremente. Buero, por su parte, defendía el posibilismo: un teatro socialmente comprometido pero que disimulaba su mensaje político para poder ser publicado y, así, alcanzar a un público más amplio.
Los elementos constantes de su obra son la búsqueda de la verdad, la defensa de la honradez consigo mismo y el amor a la justicia, todo ello unido a una profunda responsabilidad hacia la libertad. Es considerado el primer trágico contemporáneo español.
Su trayectoria refleja lo que ha sido el teatro español de los años 40, con sus preocupaciones y evoluciones. Su éxito se debe a su singularidad. La naturaleza sombría, inquietante e inconformista de su teatro fueron factores clave para que su obra llegara al público. Se mantuvo firme en su concepción del teatro, moviéndose entre los límites de la censura y luchando por ampliarlos.