El Teatro Español a Principios del Siglo XX: Géneros y Autores Clave
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La comedia burguesa
Jacinto Benavente fue el autor más representativo del teatro de principios del siglo XX. Los temas y personajes de la comedia burguesa se corresponden con los de las clases medias altas y con los conflictos típicos de las mismas. Con El nido ajeno plantea la situación opresiva de una mujer burguesa casada. La obra fue un fracaso y fue rápidamente retirada, por lo que Benavente seguirá retratando las clases altas con sus hipocresías, pero sin traspasar lo tolerable. Los intereses creados encierra una cínica visión de los ideales burgueses, ya que el tema es el poder del dinero contraponiéndolo con el amor. Señora Ama y La malquerida, ambientadas en un mundo campesino dominado por la fatalidad y por atavismos ancestrales, desarrollan un mundo de pasiones no controladas.
Hacia 1922, la crítica joven lo tacha de conservador y ñoño, pero su éxito comercial lo acompaña hasta 1950.
Teatro en verso
Se trata, por una parte, de la continuación de hábitos del XIX y, por otra, de la presencia del arte verbal modernista. Se advierte una ideología marcadamente tradicionalista que responde exaltando los ideales nobiliarios, las gestas medievales y los altos momentos del imperio. Merecen destacarse:
- Francisco Villaespesa: Vuelve la mirada hacia glorias del pasado. La leona de Castilla.
- Eduardo Marquina: Dramas de inspiración histórica. Las hijas del Cid. Sus dramas son como una especie de sucesión de estampas y sus personajes tampoco adquieren auténtico relieve.
- Hnos. Machado: Obras de inspiración histórica. Juan de Mañara (famoso personaje sevillano que pasa de don Juan a riguroso espiritual). Su obra más famosa es La Lola se va a los puertos.
Teatro cómico
Su finalidad es el entretenimiento y engloba la zarzuela, los sainetes y la comedia costumbrista. Destacan:
- Los Hnos. Álvarez Quintero: Predomina el ambiente andaluz. Sus ambientes preferidos son los acomodados, en los que no hay más problemas que los sentimentales. Sobresale el empleo de un diálogo gracioso.
- Carlos Arniches: En su obra, por una parte, tenemos los sainetes de ambiente madrileño. Muestra habilidad en el diálogo cómico sin escapar del todo del convencionalismo. El santo de la Isidra. Por otra parte, tenemos la "tragedia grotesca". La peripecia cómica envuelve a personajes desgraciados y desemboca en la risa o en lo conmovedor. Aparece así más la costumbre y la acompaña una actitud crítica. Los caciques.
- Muñoz Seca: Caracterizado por los juegos de palabras, las dislocaciones lingüísticas, los chistes y las parodias. La venganza de Don Mendo.
- El humor renovador: Renovación del teatro humorístico mediante la utilización del lenguaje y las situaciones absurdas. Destaca Enrique Jardiel Poncela con Cuatro corazones con freno y marcha atrás.