Teatro Isabelino en Inglaterra: Contexto Histórico y Social del Siglo XVI al XVII

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El Teatro Isabelino: Un Reflejo de la Inglaterra de los Siglos XVI y XVII

Contexto Histórico y Auge Cultural

Se denomina teatro isabelino a la producción teatral que tuvo lugar en Inglaterra entre 1559, año de la ascensión al trono de Isabel I, y 1642, fecha en que el Parlamento puritano ordenó el cierre de los teatros, ya bajo el reinado de Carlos I.

La corte de Isabel I se erigió como símbolo de la vida nacional. Dos hitos marcaron este periodo: el descubrimiento de América y la derrota de la Armada Invencible frente a las costas de Inglaterra en 1588. Estos eventos abrieron el camino hacia el Nuevo Continente y consolidaron a Londres como un centro mundial, impulsado por aventureros que explotaron las riquezas de tierras lejanas. Isabel I destinó parte de esta riqueza a la promoción de las artes, beneficiando a poetas, dramaturgos, pintores y músicos.

El Teatro como Expresión del Espíritu de la Época

El teatro se convirtió en la forma literaria que mejor se adaptaba al carácter del pueblo inglés de la segunda mitad del siglo XVI y la primera del siglo XVII. Su importancia radicaba en su capacidad para representar los modos de vida y los caracteres humanos, consolidándose como el género literario por excelencia en el 1600.

William Shakespeare fue un fiel reflejo de su época a través del teatro. En su obra Hamlet, el propio dramaturgo afirma que "el propósito del arte dramático, desde sus comienzos hasta ahora, fue y es, por decirlo así, poner un espejo a la naturaleza; mostrar a la virtud sus propios rasgos, al vicio su propia imagen y a cada edad y cuerpo del tiempo en su forma y tensiones" (Acto III, Escena II).

La Condición Social de los Actores

La profesión de actor se encontraba entre las más desacreditadas hacia mediados del siglo XVI. Bajo el reinado de Enrique VIII, los actores eran equiparados a pícaros, vagabundos y mendigos. A comienzos del reinado de Isabel I, se dictaminó que "tales rufianes, vagabundos, hombres sin señor, comediantes comunes y gente de mala índole", excepto aquellos sometidos a "algún varón del reino", podrían ser azotados y marcados a fuego.

Las compañías teatrales, siguiendo la costumbre medieval, se encontraban al servicio de algún noble. Esta afiliación les otorgaba un estatus social, ya que la desconfianza y el desprecio se dirigían principalmente hacia los "hombres sin señor". Sin embargo, en la segunda mitad del siglo XVI, los buenos actores poseían un alto nivel intelectual, y algunos, como Christopher Marlowe, eran considerados caballeros por su cultura.

Shakespeare figura entre los primeros actores que adquirieron escudos de armas, un símbolo del creciente reconocimiento y prestigio de la profesión teatral durante el periodo isabelino.

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