El Teatro Romano: Comedia de Plauto y Terencio
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El teatro en Roma no tuvo la misma trascendencia que en Grecia. Para los romanos, las representaciones teatrales eran ludi, es decir, "juegos", entretenimientos o diversiones, al igual que los espectáculos en el circo y el anfiteatro (ludi circenses y ludi scaenici, respectivamente).
Antecedentes
- Las farsas atelanas
- El mimo
- Los Carmina triumphalia
- Los Versus fesceninos
El origen del teatro y de las representaciones dramáticas regladas se vincula a la helenización de la cultura romana tras la Primera Guerra Púnica. Según la tradición, las primeras representaciones se atribuyen a Livio Andrónico (c. 284/204 a. C.), quien, al parecer en el 240 a. C., puso en escena una tragedia y una comedia traducidas del griego para celebrar los ludi Romani con motivo del fin de la guerra.
Tipología
Tragedia
- Fábula crepidata o coturnata: Tragedia de asunto griego.
- Fábula praetexta: Tragedia basada en la leyenda o historia romana.
Comedia
- Fabula palliata: Comedia latina de asunto griego.
- Fabula togata: Comedia sobre temas y personajes romanos.
Livio Andrónico y Nevio, iniciadores del género, escribieron obras tanto trágicas como cómicas. A partir de Plauto, se observa una tendencia a especializarse en un género.
La fabula palliata está bien documentada en las obras de Plauto y Terencio, los dos grandes cómicos de los primeros siglos de la República.
Plauto
De vida accidentada, nació en Umbría y se convirtió en actor, pero se arruinó. Desempeñó diferentes trabajos, escribió comedias y finalmente dominó la escena. Murió a edad avanzada. Desarrolló su actividad literaria hacia el año 200 a. C.
Se le atribuyen 130 obras, pero solo 21 se consideran auténticas. Algunos títulos son: Aulularia, Amphitruo, Captivi, Miles gloriosus, Menaechmi, entre otras.
Aunque sus comedias son palliatas, Plauto no olvida a su público romano, utilizando lenguaje vulgar, chistes callejeros y alusiones a costumbres e instituciones latinas, incluso satirizando personajes tópicos para el disfrute del público. Su principal objetivo era hacer reír.
Los personajes y la trama de sus comedias suelen centrarse en enredos amorosos, padres que recuperan a sus hijos perdidos, soldados fanfarrones burlados, esclavos astutos que resuelven los problemas amorosos de sus amos, parásitos aduladores y celestinas.
Terencio
Terencio, de una generación posterior a Plauto, nació en Cartago hacia el 190 a.C. y llegó a Roma como esclavo del senador Terencio Lucano, quien luego le concedió la libertad.
Se conservan seis de sus comedias: Andria, Eunuchus ("El eunuco"), Hecyra ("La suegra"), Heautontimoroumenos ("El atormentador de sí mismo"), Phormio y Adelphoe ("Los hermanos").
Hombre de exquisita sensibilidad, imitó la finura de los cómicos griegos, especialmente Menandro. Para atraer al público, recurrió a la contaminatio, mezclando argumentos de dos obras griegas para enriquecer la intriga.
Terencio, aunque inferior a Plauto en riqueza léxica, lo supera en la técnica de composición y en la pintura de caracteres. Plauto describe situaciones, Terencio dibuja personajes con gran finura psicológica a través del diálogo. Sus personajes, similares a los de Plauto (esclavos, parásitos, cortesanas, soldados), se hallan en un clima de intención moral. Su preocupación ética es constante, resumida en su famosa frase: "Soy hombre y nada de lo que preocupe al hombre me es ajeno" (Homo sum: humani nihil a me alienum puto).