La Teoría del Conocimiento en San Agustín: De la Duda a la Iluminación Divina
Clasificado en Filosofía y ética
Escrito el en español con un tamaño de 2,62 KB
Los que dudan de todo caen en una contradicción, porque el hecho de dudar ya es una verdad en sí misma. En esta certeza de la propia existencia que tiene la mente de sí misma y por sí misma, en la experiencia interior, San Agustín asentará la validez del conocimiento: no puedo dudar de la certeza de mi propia existencia.
No obstante, la mente, buscando la verdad en sí misma (un proceso de interiorización), se trascenderá a sí misma al encontrar en ella las ideas, verdades inmutables que no pueden proceder de la experiencia sensible. San Agustín distinguirá varios tipos de conocimiento:
Tipos de Conocimiento Según San Agustín
1. El Conocimiento Sensible
- Es el conocimiento que tenemos de las cosas a través de los sentidos (compartido por animales y hombres).
- Representa el grado más bajo de conocimiento, realizado por el alma.
- Solo genera opinión (doxa) y está sometido a constante modificación (una clara dependencia platónica).
- El verdadero objeto de conocimiento es lo inmutable, donde reside la verdad. El conocimiento sensible no puede ofrecernos esta verdad.
2. El Conocimiento Racional
Propio exclusivamente del ser humano, consiste en una elaboración efectuada por la razón a partir de los datos de los sentidos. Dentro de este, se distinguen dos tipos:
a) Actividad Inferior (Ciencia)
- Es el conocimiento de lo que hay de universal y necesario en la realidad temporal.
- Depende del alma y se produce a raíz del "contacto" con la realidad sensible.
- Establece juicios sobre las realidades concretas basándose en modelos inmateriales, universales y eternos.
b) Actividad Superior (Sabiduría)
- Es el conocimiento de las verdades universales y necesarias a través de la mente, sin que intervengan los sentidos (influencia platónica).
- Existe una gradación del conocimiento: las ideas se encuentran en la mente de Dios.
- Solo se pueden conocer mediante la iluminación divina que Dios concede al alma.
La Iluminación Divina: Vías de Interpretación
Esta iluminación divina se puede interpretar de varias maneras:
- El alma contemplaría la esencia divina directamente.
- Es un poder o capacidad que Dios concede a la razón humana.
- El alma está capacitada intrínsecamente para alcanzar las verdades eternas.
San Agustín establece un símil con Platón entre el sol y el Bien: la idea de Bien ilumina todas las demás realidades, permitiendo que sean captadas y comprendidas por la mente.