El Texto: Definición, Clasificación y Propiedades
Definición de Texto
El texto es la unidad máxima de comunicación, ya sea oral o escrita, de longitud variable que posee unidad temática y tiene sentido autónomo y completo. Un texto es, pues, la unidad comunicativa en la que se manifiesta el lenguaje humano. Nos comunicamos a través de textos y no de palabras sueltas u oraciones.
El texto está constituido por partes relacionadas de tal modo que no pueda eliminarse una sin destruir la totalidad. De forma general, podemos considerar como partes constitutivas del texto el enunciado y el párrafo. El párrafo viene determinado en la comunicación oral por un amplio descenso de la entonación seguido de una pausa. En la escritura se señala mediante el punto y aparte.
Clasificación de los Textos
Los textos pueden ser muy diferentes unos de otros, por eso no pueden clasificarse siguiendo un solo criterio, sino que aplicaremos diferentes criterios para clasificar cada texto. Pueden clasificarse según si son orales o escritos, en cuyo caso la sintaxis oral está menos estructurada que la escrita. También según su objetivo comunicativo (informativos, prescriptivos, persuasivos, estéticos). Según su modalidad (si son descriptivos, narrativos, expositivos o argumentativos). Y finalmente, según su tema (periodísticos, publicitarios, científico-tecnológicos, humanísticos, jurídico-administrativos, literarios).
Propiedades Textuales
Todo texto debe cumplir las siguientes tres propiedades:
Coherencia
Un texto es coherente cuando todos los elementos que lo integran están organizados en torno y conforman un todo unitario. La coherencia se consigue mediante el tratamiento de la información y la organización de las ideas a lo largo del texto.
La Información
Todo texto debe transmitir información y para ello existen una serie de mecanismos:
- Tema: Es aquello de lo que se habla o escribe.
- Presuposiciones: Se trata de la información que el emisor del texto supone que conoce el receptor.
- Implicaciones: Se trata de las informaciones adicionales contenidas en un enunciado.
- Conocimiento del mundo: La coherencia de un texto depende también del conocimiento general de nuestro mundo que tengamos.
- Marco: Se trata del tipo de texto, su finalidad y la situación comunicativa en la que se produce.
La Organización de las Ideas
En general, podemos establecer diferentes esquemas textuales dependiendo de dónde se sitúe la idea principal:
- Analizante: La idea fundamental se encuentra al principio del texto y se desarrolla en los distintos párrafos.
- Sintetizante: La idea fundamental se halla al final como conclusión general, los párrafos precedentes llevan hacia el tema.
- Encuadrado: Aparece al inicio la idea fundamental, que se desarrolla o explica a continuación.
- Paralelo: Las ideas no se subordinan unas a otras, sino que todas tienen igual importancia.
Cohesión
Un texto está cohesionado cuando las partes que lo constituyen se presentan correctamente unidas o enlazadas a través de distintos mecanismos lingüísticos. Entre estos mecanismos destacamos:
- Referencia: Es el mecanismo de alusión a algún elemento mencionado en el texto o a algún elemento de la situación comunicativa. Habrá dos tipos de referencia: referencia situacional (algunos elementos del texto remiten a otro elemento de la situación comunicativa que no está citado en el enunciado) y referencia textual (algunos elementos del texto aluden a algo ya enunciado con anterioridad o que se enunciará con posterioridad). Estas alusiones se realizan mediante deixis. Se trata de un mecanismo lingüístico que señala quién, dónde y cuándo.
- Sustitución (reemplazo de un elemento por otro).
- Elipsis (omisión de un elemento del enunciado al poder sobreentenderse).
- Isotopía: Consiste en la repetición de unidades lingüísticas relacionadas entre sí por su forma o su significado. Puede ser de tres tipos: gramatical: repetición de elementos de la misma categoría gramatical. Semántica y léxica: acumulación de palabras que pertenecen a un mismo campo semántico, o bien en la repetición de la misma palabra o de sinónimos. Fónica: se trata de la repetición de sonidos.
- Conectores: Son palabras o expresiones que expresan ciertos significados que presuponen la presencia de otros elementos en el texto. Los conectores pueden expresar: adición, restricción, objeción, temporalidad, causa, consecuencia, etc.
Adecuación
Tanto la forma de nuestro texto como su contenido tendrá que adaptarse a un receptor, unas determinadas circunstancias espacio-temporales, sociales, de edad, etc. Por tanto, todo texto debe adecuarse a unas normas:
- Adecuación al receptor, a sus conocimientos, su edad, su nivel cultural, su situación personal o social.
- Adecuación al tema: no divagar ni salirse del objeto del texto.
- Adecuación a la situación comunicativa, utilizando el registro lingüístico oportuno (coloquial, formal).
En conclusión, antes de elaborar un texto, ya sea oral o escrito, debemos tener en cuenta los factores lingüísticos y extralingüísticos del acto comunicativo. Esto demuestra que un texto no es un hecho aislado sino que surge dentro de unos parámetros con los que se interrelaciona.