La Torre Eiffel: Símbolo de la arquitectura moderna
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La competencia entre arquitectos e ingenieros en el siglo XIX
A lo largo del siglo XIX, se dio una competencia entre ambos tipos de profesionales. Los arquitectos valoraban las aplicaciones prácticas y la utilidad de las nuevas técnicas y materiales, pero negaban a las construcciones industriales el título de “verdadera” arquitectura, reservándolo a los edificios construidos según los estilos históricos. Por otro lado, los ingenieros veían en esos edificios no solo algo utilitario, sino el germen de un nuevo tipo de belleza, de una auténtica arquitectura expresiva de los tiempos modernos.
La inauguración de la Torre Eiffel
La Torre Eiffel se inauguró en el año 1889 y es considerada un símbolo del avance industrial y tecnológico de la Francia de aquellos años. Desde el punto de vista estético, la torre Eiffel rompió con la idea de que los edificios bellos debían ser de piedra. Esto fue logrado al desnudar totalmente la estructura y convertirla en el principal elemento de la contemplación. Ahora la estructura ya no sería solo funcional sino estética. La Torre Eiffel vista en su conjunto reúne los clásicos criterios estéticos de la armonía, la proporción y la simetría.
Los creadores de la Torre Eiffel
El proyecto de los ingenieros Maurice Koechlin y Emile Nouguier, junto al arquitecto Stephen Sauvestre, resultó elegido para darle un aspecto más estético a este monstruo de hierro que se levantaría en la ciudad de las luces. A pesar de su importancia, el proyecto fue rechazado varias veces por no adecuarse a la estética urbana de otras ciudades, como Barcelona.
Controversia y defensa de la Torre Eiffel
Muchos humanistas de la época adversaron la construcción de la torre, temiendo que se pudiera desplomar por sus dimensiones y materiales. Sin embargo, la construcción fue defendida por el señor Alphand, quien la describió como una demostración de la grandeza de Francia. A pesar de las críticas, la Torre Eiffel se convirtió en un atractivo turístico, permitiendo a los visitantes contemplar la ciudad de París desde sus alturas.