La Trayectoria Dramática de Antonio Buero Vallejo: Un Legado Teatral Imperecedero
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Un Dramaturgo Atraviesa el Siglo: Buero Vallejo
Dentro del panorama teatral de la posguerra, Antonio Buero Vallejo desarrolló un teatro social y político movido por su instinto de rebelión. A través de sus escritos, mostró su disconformidad con el sistema vigente.
Su vida (1916-2000) está ligada por completo a su obra (su última obra se estrenó un año antes de su muerte bajo el título Misión al pueblo desierto).
Vida y Trayectoria
Estudió Bellas Artes en Madrid, pero tras sufrir una crisis religiosa, crecieron sus inquietudes políticas y se alistó en el ejército republicano. Al terminar la guerra, fue condenado a muerte, pero se le conmutó la pena por treinta años de cárcel, etapa en la que despertó su vocación de dramaturgo. Una vez indultado, en 1949 ganó el Premio Lope de Vega por su obra Historia de una escalera; a pesar de sus antecedentes, se permitió su representación. Entre los numerosos premios que se le otorgaron, cabe destacar el Premio Cervantes.
La Concepción del Teatro en Buero Vallejo
Por todo ello, será importante destacar el concepto del teatro según Buero Vallejo, el cual precisó en su ensayo La Tragedia. Para él, la tragedia supone una mirada lúcida sobre el hombre y el mundo, pero no una visión pesimista, y su función es doble: inquietar y curar.
Las obras de Buero giran en torno a la realización humana y a sus dolorosas limitaciones. Su temática está enfocada a un doble plano: existencial y social, en cierto sentido político. Es un profundo moralista. La búsqueda de la verdad, la defensa de la honradez y el amor a la justicia son elementos constantes en su obra.
Etapas en la Obra de Buero Vallejo
Atendiendo a los contenidos o enfoques de sus obras, en la trayectoria del autor, puede señalarse una primera etapa en la que predomina el enfoque existencial, seguida de una segunda etapa en la que prevalece el enfoque social, acompañado de nuevos recursos escénicos incrementados en una tercera etapa.
Primera Etapa: Enfoque Existencial (hasta 1957)
La primera etapa, de enfoque existencial, se sitúa hasta 1957. Las obras se ajustan a una estética realista y a lo que él mismo llamó “construcción cerrada”. Destacan Historia de una escalera (1949) y La ardiente oscuridad (1950).
Segunda Etapa: Enfoque Social y Apertura Técnica (1958-1970)
En la segunda etapa, predomina el enfoque social y abarca obras desde 1958 a 1970, entre las que se encuentra El Tragaluz. Ahora se insiste más en las relaciones entre el individuo y su entorno, enmarcadas en un tiempo y unas estructuras sociales más concretas. En cuanto a la técnica teatral, esta etapa supone un giro en el arte dramático del autor: pasa de una construcción cerrada a una construcción abierta, lo que conlleva a una superación de la escenificación realista. Como novedades ya presentes encontramos en El Tragaluz: escenario múltiple, construcción de la acción en cuadros o secuencias con creciente soltura y recursos de participación que acercan al espectador al drama. En esta época, el arte dramático del autor adquiere mayor complejidad y riqueza de planos.
Tercera Etapa: Intensificación y Novedades Escénicas (años 70)
En la tercera etapa, se habla de una intensificación de los rasgos de la etapa anterior y se sitúa en los años 70. La Fundación fue reconocida como una de las cimas del autor. En cuanto a temas, los contenidos sociales y políticos se hacen más explícitos, como bien se refleja en la obra mencionada.
Innovaciones Técnicas
En cuanto a la técnica, Buero avanza por la vía de las novedades escénicas. Un rasgo primordial será el desarrollo que alcanzan los llamados efectos de inversión. Así, recursos de sonido y luz nos hacen oír o ver las cosas tal como las percibe o como las imagina algún personaje. Con ello, logra expresar la subjetividad, lo escondido en la conciencia de los personajes, sus obsesiones e incluso sus trastornos psíquicos y, a la vez, se propicia una participación más intensa del espectador.
Conclusión
En conclusión, nos encontramos ante un dramaturgo fundamental de la contemporaneidad española, cuya trayectoria resume los pasos que ha seguido el teatro desde los años 40 con sus preocupaciones existenciales, sociales y estéticas.