Trayectoria y Obras Clave de Ludwig Mies van der Rohe: De la Tradición a la Modernidad
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Ludwig Mies van der Rohe: Inicios y Primeras Influencias
Ludwig Mies van der Rohe comenzó su trayectoria en un taller de carpintería, para luego ingresar al estudio de Peter Behrens. Sus primeros encargos, como la Casa Riehl (1907), le abrieron paso a la élite del pensamiento alemán. Esta obra inicial ya mostraba la influencia del clasicismo racional de Behrens, buscando monumentalizar lo clásico y destilarlo hasta su esencia, así como ciertos ecos de Schinkel.
Transición hacia la Modernidad y Experimentación
Tras la Primera Guerra Mundial, en 1922, Mies se aproximó al expresionismo. Destacan proyectos teóricos para revistas como Frühlicht, con propuestas de rascacielos de vidrio en Berlín y módulos de planta triangular, y para la revista G, con un edificio de hormigón y vidrio que presentaba una "arquitectura de huesos" (retícula de hormigón) y una "piel de vidrio" que envolvía el edificio.
Posteriormente, diseñó una Casa de Campo en ladrillo, y sus líneas arquitectónicas comenzaron a definirse:
- Relación con el Clasicismo: Mies buscó traducir los conceptos del clasicismo a la arquitectura contemporánea, depurándolos hasta alcanzar su esencia y yendo más allá del "menos es más" de su maestro.
- Distancia del Funcionalismo: No se limitó a ser un "maquinista" o un enamorado de la técnica; las innovaciones eran para él elementos poéticos para lograr el orden, buscando la esencia del hombre y estableciendo una relación poético-religiosa entre el hombre y la arquitectura.
- Influencia de Berlage y Schinkel: La construcción era un elemento básico e inseparable de la arquitectura, lo que llevó a Mies a emplear el ladrillo visto, valorando la artesanía y la sinceridad constructiva.
- Desarticulación y Planta Libre: Influenciado por Frank Lloyd Wright y el suprematismo ruso, Mies incorporó la desarticulación de espacios y la planta libre, creando una continuidad espacial que se extendía al exterior. Proyectos como la Casa Wolf (1925-1927) y la Casa Esters y Lange (1927-1930) ejemplifican estos conceptos, destacando el uso del ladrillo visto y la belleza de la construcción.
Mies van der Rohe y la Colonia Weissenhof
Mies fue el coordinador del plan general de la Colonia Weissenhof (1925-1927), donde se acercó a la idea de Taut del "espacio glorioso" en la ciudad. La vivienda consistía en un bloque de cuatro plantas con un sistema constructivo perimetral que dejaba el interior libre, permitiendo flexibilidad en los programas familiares y situando los núcleos húmedos de manera compacta.
Proyectos Emblemáticos Antes de Estados Unidos
Antes de su traslado a Estados Unidos en 1938, Mies desarrolló proyectos significativos:
Pabellón de Alemania (Barcelona, 1929)
En el Pabellón de Alemania, Mies empleó acero, hormigón, vidrio y materiales tradicionales como travertino, ónix y cromo, creando contrastes de textura y reflejos. La desarticulación de la planta y la fluidez espacial fueron innovadoras, dividiendo el pabellón en zonas (ceremonial central, administración, terraza principal y patio sur) que se fusionaban, disolviendo las fronteras entre interior y exterior. El mobiliario, diseñado por el propio Mies, complementaba la idea de libertad y progreso de la nueva república alemana.
Casa Tugendhat (Brno, 1928-1930)
La Casa Tugendhat, ubicada en una pendiente, se accedía por la parte superior. La zona de día, en la parte baja, se resolvía con una estructura metálica y una planta libre, incorporando planos verticales que generaban ambientes interconectados. Una gran cristalera establecía una relación directa con el paisaje, y un panel curvo revestido en madera actuaba como núcleo de la vivienda. En la planta superior, aunque con menos libertad, se buscaba integrar el exterior.
Proyectos de Casas Patio (1931)
En este proyecto teórico, Mies fusionó las ideas del Pabellón en un programa de vivienda completo. La fachada cerrada solo revelaba el "hogar" al exterior, una propuesta inédita que se apartaba de las ideas de los CIAM y la Bauhaus. La parcela se rodeaba de altas tapias, asegurando la privacidad, y una cubierta plana y grandes acristalamientos protegían los espacios interiores, que se abrían a patios amplios.