Vitalismo y Razón: Confrontación Filosófica entre Nietzsche y Ortega y Gasset

Ortega y Gasset vs. Nietzsche: La Vida como Realidad Fundamental

Puntos de Convergencia: El Rechazo al Idealismo

Tanto Ortega como Nietzsche defienden la vida como una realidad temporal, plural, cambiante y experimentada por el individuo viviente. Ambos rechazan la concepción obstinada del hombre como un sujeto pensante puro, no condicionado por su cuerpo, sociedad e historia.

Del idealismo, ambos filósofos rechazan:

• La consideración de la conciencia pensante como la realidad primera y fundamental de la que dependen el mundo y la vida.
• La importancia que se le da a la realidad de los conceptos abstractos de la razón frente a la realidad sensible.

Puntos de Divergencia: Razón y Vitalismo

Nietzsche: El Vitalismo Radical y la Voluntad de Poder

Nietzsche, como vitalista, niega la realidad objetiva de los conceptos más allá del pensamiento racional. La realidad primera son los instintos vitales del cuerpo. Niega que exista la verdad absoluta y afirma que lo que realmente impulsa a buscarla es la voluntad de poder.

Ortega: Razón Vital y Perspectivismo

Para Ortega, la razón es una función de la vida para hacer frente a las circunstancias de la vida. Por lo tanto, la razón no niega la vida (como sostenía Nietzsche), sino que la orienta en ella y permite vivirla al darle sentido.

Ortega defiende que todas las personas tenemos un punto de vista de la vida según nuestras circunstancias. Cree que los proyectos vitales no son solo individuales, sino también históricos y sociales. Además, el hecho de que la razón tenga acceso a una comprensión perspectiva de la vida desde el punto de vista del individuo no implica que conocer la realidad la deforme.

Glosario de Conceptos Clave en la Crítica Metafísica

Conceptos Supremos

Se refiere a conceptos como “lo existente”, “lo incondicionado”, “lo bueno”, “lo verdadero” o “lo perfecto”. No son más que conceptos vacíos y abstractos, empleados por la filosofía occidental tradicional para interpretar la realidad.

Son trascendentes, puesto que sobrepasan el testimonio de los sentidos y no pueden, por ello, depender únicamente del ser humano.

Causa Sui

Que algo sea causa de sí mismo es, para Nietzsche, un concepto absurdo. En la filosofía medieval, este concepto se suele aplicar a “Dios”, el único ser que no tiene causa exterior. Pero también puede aplicarse al ser humano, en tanto que ser libre: su comportamiento no está determinado por ninguna otra causa que por sí mismo.

Dios y la Muerte de Dios

El concepto “Dios” no es únicamente un concepto religioso; es también un concepto metafísico que sirve para designar la realidad fundamental y cualquier tipo de trascendencia que dé sentido a la vida. Es la máxima representación del mundo de los conceptos y el fundamento de la existencia del mundo, del ser humano y sus valores para la filosofía idealista.

Nietzsche proclama “la muerte de Dios”. Con ello pretende poner de manifiesto la caída de los valores e ideales occidentales. Esta situación provoca:

• La desorientación del hombre moderno.
• La ausencia de proyectos y la negación de la vida.
• La constatación del carácter absurdo de nuestra existencia (el “nihilismo” pasivo o negativo).

Sin embargo, también se abre una gran esperanza: que el ser humano sea capaz de crear nuevos valores y nuevas metas. El “nihilismo activo” permitirá acabar con los viejos valores nihilistas y aparecerá un nuevo tipo de hombre, el “superhombre” (Übermensch), capaz de decidir y valorar por su propia voluntad, consciente de que solo él es el creador de los valores.