Arquitectura del siglo XIX: Características, estilos y ejemplos destacados

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Arquitectura del siglo XIX: Características generales

Frente al mundo tradicional, rural, cerrado y de evolución lenta, el nuevo mundo industrial era cada vez más abierto e intercomunicado: movimientos de hombres, mercancías e ideas.

Aparición del urbanismo como “ciencia”.

La arquitectura se beneficia de los nuevos procesos industriales.

Crisis profesional y estética.

Junto a las nuevas y atrevidas construcciones en hierro (fábricas, estaciones, puentes, mercados, pabellones de exposición…) los edificios destinados al poder, la religión y la cultura siguieron un lenguaje histórico.

Eclecticismo: mezcla indiscriminada y manejo arbitrario de los distintos estilos arquitectónicos.

Historicismo: valor exagerado otorgado a la historia.

Época de los llamados “neos”: neogótico, neorrománico, neorrenacimiento, neobarroco, neoislámico… Proliferó durante el siglo XIX y gran parte del siglo XX, sobretodo en edificios oficiales.

El arquitecto y el cliente podían escoger su estilo como en el catálogo de unos grandes almacenes.

Ejemplos destacados de arquitectura del siglo XIX

  • Templo de la Magdalena en París
  • Parlamento de Londres
  • Congreso de los diputados
  • Basílica de Covadonga

El uso del hierro era conocido pero hasta el siglo XIX no se generaliza, ya no se oculta sino que se convierte en el símbolo del progreso y la modernidad.

La estructura de metal (hierro y acero) se combinaban con revestimientos de cristal.

A finales de siglo aparece el hormigón armado.

La torre de Gustave Eiffel es el mejor ejemplo de la arquitectura del hierro. Se levantó con motivo de la exposición universal de París en 1889, conmemorando el 1º centenario de la revolución francesa.

La torre Eiffel

Cuando las autoridades decidieron desmontarla, la oposición del público fue tan grande que permaneció, convirtiéndose en símbolo del París moderno.

Auditorio de Chicago

El Modernismo

A partir de 1890 surge en diversas ciudades europeas una nueva arquitectura que recibe diversos nombres según los idiomas de los distintos países en los que arraigó.

Renuncia a la historia como modelo, interés por las artes exóticas (Japón), referencia constante a la naturaleza, hiperdecorativismo, arquitecturas marcadas por el color, combinación de diversos materiales, predominio de las curvas y formas sinuosas.

Voluntad de novedad, de olvidar un mundo viejo y caduco. Aspiración a la “obra de arte total”, a sintetizar todos los aspectos de la vida cotidiana.

El tema característico de esta arquitectura es la casa unifamiliar de lujo.

Triunfa en las ciudades industriales, “nuevas”.

Victor Horta (1861-1947)

En Bruselas hace una serie de casas burguesas unifamiliares en las que la estrechez del solar queda compensada por un auténtico estallido interior de luz, color y diseño artístico en cada uno de los elementos.

Casa Tassel

Antoni Gaudí (1852-1926)

En Barcelona la burguesía reclama un arte fantasioso, elegante, lleno de referencias naturalistas y a la vez intensamente nacionalista y religioso.

Gaudí rechaza la geometría y recurre a las verdaderas formas que en su opinión, se hallan en la realidad.

Reivindica los oficios tradicionales y los materiales humildes.

El arquitecto es ante todo un artesano.

Parque Güell

Encuentra perfecta sintonía con el empresario Eusebi Güell para el que realiza diversas obras.

La pedrera

Casa Batlló

Bodegas Güell

El capricho

La Sagrada Familia

Bóveda y columnas de la Sagrada Familia.

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