Compositores y artistas destacados en la música clásica

TCHAIKOVSKY, Piotr Illich (1840-1893):

Compositor y pianista ruso romántico, el más internacional y menos nacionalista de los compositores rusos de su generación, si bien en muchas ocasiones su música suena reconociblemente eslava. Preciosista y formalmente impecable, su música es muy pasional y emotiva, siendo tachada por algunos críticos como excesivamente romántica. Cultivó todo tipo de géneros musicales, desde la ópera a la canción, desde la sinfonía y el poema sinfónico a las pequeñas formas pianísticas, pasando por toda la música de cámara; quizá sus piezas más populares hayan sido sus ballets como La bella durmiente, Cascanueces o El lago de los cisnes, con los que elevó enormemente la calidad musical habitual de este tipo de espectáculos escénicos, renovando así la música de este género.

LISZT, Franz (1811-1886):

Compositor húngaro, probablemente el pianista más famoso de todos los tiempos, que desarrolló la técnica pianística de modo considerable. En su faceta de concertista fue el primer ídolo musical de masas y el iniciador del moderno recital de piano en grandes auditorios. Como compositor destacó en muchas facetas: sus obras para piano, por supuesto, son de mucha dificultad pero siempre de idéntica musicalidad; sus obras orquestales, entre las que destacan numerosos poemas sinfónicos y sinfonías programáticas, le hacen el principal cultivador de este tipo de piezas, continuando y ampliando el camino abierto por Berlioz. Nos hay que olvidar además su papel como transcriptor para piano y divulgador de la música de muchos otros compositores, en reducciones, adaptaciones y paráfrasis de numerosas piezas de ópera y de orquesta para el piano. En su última época compuso música religiosa de gran calidad.

BRETÓN, Tomás (1850-1923):

Compositor, violinista y director de orquesta español. Aunque cultivó, con desigual suerte distintos géneros musicales, desde la ópera, su verdadera pasión, a la música sinfónica o de cámara, Bretón es conocido sobre todo como autor de zarzuelas, el género de moda en la España del siglo XIX, siendo la más conocida de toda su producción La Verbena de la Paloma, su primer gran éxito, que le llevaría a alcanzar una gran popularidad semejante a la obtenida por Barbieri o Chueca, reputados compositores de zarzuela de la época.

PETIPA, Marius (1822-1910):

Bailarín y coreógrafo francés, maestro desde 1859 de la Escuela Imperial de Ballet de San Petersburgo, capital del Imperio Ruso y residencia de los zares. Entre sus innovaciones destacan: la exigencia de gran destreza técnica a todo el cuerpo de baile y no sólo a las primeras figuras; la importancia dada al bailarín masculino en la danza, tradicionalmente relegado a mero acompañante de la bailarina; y el invento de pasos y movimientos nuevos que constituyen la base del ballet posterior. Todo ello llevará al ballet ruso a un nivel de perfección técnica elevadísima. Tchaikovsky compuso la música de sus ballets más conocidos (La bella durmiente, Cascanueces, El lago de los cisnes). El momento culminante en los ballets de Petipá es el llamado Pas de Deux o Paso a Dos, en el que bailan tanto conjuntamente como alternándose los componentes de la pareja protagonista.