Las Cortes de Cádiz: La Constitución de 1812

Entre mayo y agosto de 1808 se habían formado en España 13 juntas provinciales, cuyos representantes constituyeron la Junta Central Suprema Gobernativa del Reino, que asumió los poderes soberanos y fue el máximo órgano de gobierno. Numerosas instituciones se cuestionaron si obedecer al nuevo rey (José I) o declararse a favor de la Junta Central. A partir de esto, surgieron dos bandos: los Afrancesados (a favor de José I) y los patriotas (opuestos al nuevo rey, que se dividían en liberales y absolutistas).

Las derrotas que sufre España por parte de Francia obligan a la Junta a trasladarse a Cádiz, única ciudad sin ocupación francesa. Esta Junta da lugar a una Regencia, que actúa como gobierno provisional y que decide convocar las Cortes. La convocatoria de Cortes se hizo de forma revolucionaria, porque en vez de reunirse por estamentos va a ser por sufragio universal. Mediante un sistema de elección fueron elegidos representantes de 33 ciudades, a razón de un delegado por cada 50.000 habitantes. El objetivo era que los representantes redactaran una constitución para el reino. En 1810 se convocan Cortes Generales en Cádiz, compuestas por 308 diputados, de ideologías diversas, aunque predominaban las posiciones ilustradas y claramente liberales.

Las Cortes de Cádiz promulgaron una serie de decretos eliminando los fundamentos del Antiguo Régimen:

• En 1810, se decretó la libertad de imprenta que suprimía la censura para los escritos públicos, pero no para los religiosos.
• En 1811, fueron abolidos los señoríos jurisdiccionales, desapareciendo así los conceptos de señor y vasallo.
• En 1813, fueron suprimidos los gremios, abriendo paso a las relaciones económicas capitalistas.
• En 1813 también, se decretó la incautación y venta en subasta pública de las tierras comunales de los municipios, de las órdenes militares y de los Justicias, como medida desamortizadora.
• Fueron eliminados los privilegios de la Mesta (1813) y fue abolida la Inquisición (1813) que impedía el desarrollo de la libertad de pensamiento y de la ciencia.

El 19 de Marzo de 1812 (“La Pepa”) se aprueba la constitución y sus 384 artículos regulaban todas las cuestiones relacionadas con la vida política y los derechos de los ciudadanos. Proclamaba la soberanía nacional, la monarquía constitucional y la función legisladora quedaba en manos de las Cortes, con una sola cámara, elegida por sufragio universal masculino. Para ser diputado se requería ser propietario. Definía España como un estado unitario y reconocía derechos y libertades políticas a todos los ciudadanos. Los diputados representaban a la nación que estaba dividida en provincias y municipios y se fijaba un estado centralizado, políticamente y administrativamente. Se disponía una fiscalidad común y un ejército llamado “Milicia Nacional” formado por ciudadanos. Por último, se establecía la educación primaria en todos los pueblos y se declaraba el estado confesional, reconociendo únicamente el ejercicio de la religión católica.