Delitos voluntarios de ancianos en Japón: la soledad como causa

Estamos aquí para hablar de uno de los problemas que cada vez se hace más presente en la sociedad de Japón: los delitos voluntarios de personas de la tercera edad. ¿Cómo es posible que personas que aparentemente tienen una vida plena y tranquila quieran robar arriesgándose a acabar en la cárcel? La respuesta es muy sencilla. La soledad. Debido a la forma en la que está configurada la sociedad y las limitaciones que tiene, los ancianos roban para poder tener contacto con otras personas. Para estar rodeados de gente que les escuche y con los que puedan interactuar.

La soledad en Japón

Uno de los países más poblados del mundo como es Japón tiene a las personas más solitarias del planeta. Esta situación refleja perfectamente el problema de identidad del ser humano. ¿Quién soy yo? ¿Qué hago aquí? ¿Cómo me relaciono con los que me rodean? En otras sociedades, las interacciones entre las familias y las personas lo es todo. En Japón, esta relación se lleva a cabo de una manera diferente ya que el individualismo y el cumplimiento de las normas es mucho más importante.

Reflexión y educación

Es necesario que haya una reflexión por parte de la sociedad japonesa sobre el rumbo que están tomando las nuevas generaciones. Es importante que desde la propia educación se enseñe a los jóvenes a valorar sus capacidades individuales pero al mismo tiempo percibir el valor de desarrollarlas dentro de una sociedad plural y abierta que interacciona y se comunica con ellos.

Autoconocimiento y plenitud

Desde el inicio de los tiempos, los seres humanos hemos mirado a las estrellas y nos hemos preguntado el lugar que ocupamos en este lugar llamado mundo. Hemos creado mitos, leyendas, y héroes que son un reflejo de es aquello que queremos llegar a ser y que dan un sentido a la existencia Según han avanzado las generaciones, el planeta se ha transformado haciendo que las relaciones con nuestros semejantes y con la sociedad sea diferente. Cientos de filósofos han dado su punto de vista sobre lo que es el hombre.

Valores en la educación

No obstante, lo que importa es ser capaces de hacer un ejercicio de abstracción, de ver el recorrido que nos ha llevado hasta este punto y poner en valor que cada ser humano, cada vivencia, cada recorrido ha sido único. No se trata de encontrar el sentido de la existencia terrenal a través de las teorías de otras culturas o generaciones sino a través de nuestras propias circunstancias individuales.

Por eso, desde el propio sistema educativo, se tiene que educar a estas nuevas generaciones en Japón en valores como el autoconocimiento para que puedan tener una existencia mucho más plena. Una sociedad donde sea posible abrirse al resto de las personas que la componen y en la que cada individuo sea consciente de su papel individual y colectivo. Donde no sea necesario reprimir las emociones para poder cumplir con las obligaciones sociales.

Único y especial

Sólo así, fomentando la ayuda, la reflexión y la comunicación se podrán ver que cada ser humano es único y que cada definición del sentido de cada persona se crea desde uno mismo. Porque cada ser humano somos especiales y hacemos nuestro camino.