Familia troncal

 ¿CUÁLES SON LOS MOTIVOS FUNDAMENTALES POR LOS QUE LAS FAMILIAS REQUIEREN INTERVENCIÓN PSICOLÓGICA?

• Uno o los dos padres no aceptan la sordoceguera de su hijo. Es difícil poder aceptar las perdidas sensoriales. Puede llevar a ocultar esta situación y se suele agravar cuando se indica a la familia que se han de buscar otras alternativas a la comunicación.
• Solo uno de los miembros asume toda la responsabilidad de la persona discapacitada. Las decisiones que se deben tomar recaen sobre el mismo miembro. Esto genera descarte personal, sentimientos de ansiedad y de soledad que puede provocar depresión.
• Se delega la educación y la responsabilidad del progreso de su hijo en los diferentes profesionales. Puede ocurrir que poder compartir el problema con los profesionales haga que la familia llegue a no implicarse en el proceso educativo, evolutivo y social.
• La familia mantiene una actitud de sobreprotección hacia el individuo sordociego. Requiere más tiempo que la familia confié en las distintas posibilidades de la persona sordociega. Se encuentran centrados en todo lo que no puede hacer y no tienen en cuenta las aptitudes y facultades que poseen o pueden aprender.
• El enfrentamiento a cada una de las diferentes etapas del desarrollo. El paso por los diferentes cambios del desarrollo de una persona sordociega le supone a la familia enfrentarse a nuevos retos. Además de hacer frente a nuevas situaciones propias de la edad, deben asumir el final de una etapa infantil o adolescente y entrar en una etapa como persona adulta.

¿CUÁLES SERÍAN LAS PRINCIPALES DIFICULTADES QUE PODRÍA ENCONTRARSE EL MEDIADOR CUANDO EJERCE SU LABOR PROFESIONAL DENTRO DE LA FAMILIAS DE PERSONAS SORDOCIEGAS?

1. El paso a la etapa adulta, así como su comprensión y aceptación por parte tanto de la persona sordociega como su entorno familiar.

2. Para determinadas familias puede resultar difícil que ahora la persona sordociega pueda realizar gestiones o resolver asuntos de interés personal de forma autónoma y sin necesitar la presencia constante e incondicional.

3. El mediador comunicativo va a intentar acercar a la persona sordociega toda la información que le es ofrecida, sea o no de su agrado, mientras que los familiares, en su protección, pueden pretender seguir filtrando aquello que, según su criterio, puede ser doloroso, dificultado que adquiera madurez.

4. Se pueden producir situaciones tensas o violentas al mostrar la familia su oposición a que el mediador trasmita la información en su totalidad.