Francisco de Goya: Precursor del Arte Contemporáneo

A partir de su trayectoria artística, explica por qué Francisco de Goya es considerado precursor del arte contemporáneo.

Muchos de los artistas nacidos en la segunda mitad del siglo XVIII tuvieron rasgos románticos. Goya, como David, inició su carrera artística dentro de los presupuestos artísticos y estéticos del arte tradicional (Neoclasicismo) y tras una apasionante evolución se convirtió en pionero del arte moderno. A Goya, dada la complejidad de su evolución y su genialidad, no se le puede adscribir a un único estilo porque, habiéndolos experimentado casi todos, su obra se proyecta hacia el futuro. Por ello es considerado el precursor del arte contemporáneo.

Goya se ha erigido como el mejor intérprete de una época, convirtiéndose en el espejo en el que se ofrece nuestra imagen más certera. Este valor emblemático lo fue a encarnar la obra de un pintor español.

Goya no fue un artista precoz ni le fue fácil triunfar. Hijo de un artesano dorador, su infancia transcurrió en Zaragoza, donde comenzó su aprendizaje artístico. En su momento, como también le ocurrió al joven David, Goya trató de obtener una de las plazas de pensionado de Roma convocadas por la Academia Española de San Fernando, pero no se la concedieron y se marchó a Italia con sus propios medios a fines de 1770. Tras regresar a Zaragoza, se casó en 1773 con Josefa Bayeu, hermana de los también pintores Francisco y Ramón, que le abrieron paso para marchar a Madrid.

Desde el punto de vista artístico, la primera tarea que le fue encomendada a Goya ya en Madrid era la modesta de pintar cartones para tapices, donde la temática le era impuesta y había que atender a las limitaciones técnicas que imponía una obra pensada para trasladarse al tejido. Se trataba de escenas populares de naturaleza lúdica donde se buscaba mostrar el lado más positivo de la vida de la gente común ('La pradera de San Isidro', 'El Pelele'). Tras ser nombrado primer pintor de cámara del rey, se erige en la figura capital del arte español de ese momento con obras como 'La Familia de Carlos IV', 'La condesa de Chinchón' o 'La maja desnuda'.

La obra de Goya durante el primer cuarto de siglo XIX, entre la que destaca 'El 3 de mayo en Madrid o Los Fusilamientos', fue de tal calibre que no sólo adelantó muchos de los temas del entonces naciente Romanticismo, sino que iluminó el arte y la conciencia de nuestra época contemporánea. La obra de esta última etapa de su vida influyó de manera decisiva en las sucesivas vanguardias artísticas posteriores, impresionistas y expresionistas ('Pinturas negras' de la Quinta del Sordo). Por todo ello, aunque las tres cuartas partes de su vida tuvieron como escenario histórico el siglo XVIII, su obra trascendió su época personal y cobró pleno sentido en el arte posterior.