La II República Española: Fases y Aspectos Políticos
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La II República Española (Abril 1931-Abril 1939)
El 14 de abril de 1931 se proclama la II República. En las elecciones del 12 de abril, los votos dieron por muy poco margen en victoria a las candidaturas republicanas. El rey Alfonso XIII se va de España ese mismo día. La victoria republicana se consolida en las grandes ciudades, mientras que la España rural votó a los partidos monárquicos.
Fases
El Bienio Progresista
De abril a junio hay un gobierno provisional y en las elecciones del 20 de junio se produce mayoría republicana. Preside Niceto Alcalá-Zamora y el jefe del gobierno es Manuel Azaña. Son dos años de profundas reformas en la educación, social y política. Se promulga la Constitución de 1931 de signo democrático. Las revueltas y la quema de conventos provocan el caos que desemboca en nuevas elecciones en noviembre de 1933.
Bienio Radical
La C.D.A (Confederación de Derechos Autónomos), dirigida por Gil Robles, gana las elecciones. El gobierno de Gil Robles tuvo que enfrentar la revolución de Asturias en octubre de 1934. Esta revuelta de la minería, dirigida por la UGT, el PSOE, PC y la CNT, acabó con una fuerte represión por el ejército y fue la antesala de la guerra civil.
El Frente Popular
En las elecciones del 15 de febrero de 1936, la izquierda y los partidos republicanos presentan juntos el Frente Popular. Presidiría la república Manuel Azaña y el jefe de gobierno sería Casares Quiroga. Meses de enorme tensión social. El PSOE se niega a participar en el gobierno y piensa en crear una república socialista. El terrorismo anarquista y falangista se adueña de la calle y ante el caos político y social, parte del ejército prepara un golpe de estado.
Aspectos Políticos
La Constitución de 1931 es la base política de la II República. Características: república de trabajadores, estado laico/no confesional, unicameral, sufragio universal, justicia independiente. Los partidos políticos fueron: Acción Republicana, PSOE, POUM, Partido Comunista, Acción Nacional, CEDA, Falange de las JONS, CNT y UGT.
En conclusión, una España bipolarizada entre la derecha y la izquierda con el fracaso de los partidos republicanos progresistas. Este extremismo se apoyó en el proceso de enfrentamiento social e ideológico que desembocó en la guerra civil con el golpe de estado del 18 de julio de 1936.