Infecciones Nosocomiales: Prevención y Lavado de Manos
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Infecciones Nosocomiales
Explica y comenta todo lo que sepas sobre ellas.
También llamadas enfermedades hospitalarias. Son las que se adquieren en el propio centro sanitario, durante su asistencia o como consecuencia de su trabajo. Se manifiestan en el propio hospital o más tarde en su domicilio. No se incluyen las infecciones en periodo de incubación en el momento del ingreso, que en teoría se manifiestan en las primeras 72 horas.
Factores que favorecen las infecciones hospitalarias
El hospital (o centro) favorece el desarrollo y difusión de las infecciones debido a:
- Mayor susceptibilidad del enfermo hospitalizado, debido a:
- Su estado (de enfermedad, nutricional, edad)
- Técnicas instrumentales que se aplican (punciones, sondas)
- Tratamiento al que ha sido sometido.
- Cambios en la composición de la flora hospitalaria (Flora: conjunto de microorganismos que se localizan normalmente en distintos sitios del organismo)
- Mayor número de reservorios y fuentes de infección.
- Mayor facilidad de difusión y transmisión.
Todos estos factores actúan produciendo alteraciones anatómicas del sistema inmunitario y alteraciones de la flora microbiana normal.
Infecciones hospitalarias más frecuentes
Las infecciones hospitalarias más frecuentes son las de tracto urinario, de heridas quirúrgicas, del aparato respiratorio, de la piel y tejido celular subcutáneo y en menor proporción de bacteriemias (bacterias en sangre).
Lavado de Manos
¿Las situaciones en las que se debe realizar siempre el lavado de manos son?
La flora cutánea humana puede dividirse en transitoria y residente. La residente vive y se desarrolla encima de la piel y no es perjudicial, mientras que la flora transitoria, que puede ser patógena, se encuentra en la capa más superficial de la piel y se puede eliminar con un lavado higiénico de manos o con la higienización.
Las manos son la principal fuente de transmisión de las infecciones cruzadas.
El lavado higiénico de manos es la principal medida de prevención de las infecciones nosocomiales, junto con el uso de guantes. Su objetivo es destruir los gérmenes y otros contaminantes, consiguiendo un alto grado de asepsia en manos y muñecas.
Situaciones en las que se debe realizar siempre el lavado de manos
- Antes y después de la jornada laboral.
- Antes y después de usar el inodoro/aseo.
- Antes y después de comer.
- Antes y después de preparar medicación y alimentos.
- Antes y después de cualquier contacto con los usuarios.
- Antes y después de realizar cualquier técnica.
- Cuando se considere necesario.