Toma de muestras en sistemas líquidos

1. MATERIALES COMPACTADOS.

Este térmico abarca multitud de materiales tanto de origen natural como antropogénico y de diferentes densidades y tamaños, además la toma de muestra también dependerá de si el análisis posterior es destructivo o no, de si se busca determinar la concentración de un componente mayoritario o minoritario, o si en cambio se busca el control de alguna propiedad física del material.

Para ello se utilizan sondas o incluso taladros de hasta 30 cm de diámetro que astillan o cortan la muestra, existe el problema que al romperse la muestra en partículas más pequeñas podremos perder la representatividad de la misma, pero no siempre es posible realizar taladros de muestras, fundamentalmente por el valor de la muestra (bloque de un metal precioso), y el análisis posterior es destructivo. Entonces lo que se hace es tomar una porción en uno de los extremos o en la superficie.

1. TOMA DE MUESTRAS LÍQUIDAS.

En principio presenta menos problemas que la sólida. Esto es válido cuando la muestra tiene una sola fase o bien es suficientemente pequeña para que se pueda homogeneizar por agitación previa a la toma de muestra, pueden dividirse en 4 grandes tipos, dependiendo de sí estas muestras líquidas están en movimiento o estáticas, o si son sistemas abiertos o cerrados.

1. MUESTRAS LÍQUIDAS EN MOVIMIENTO EN SISTEMAS ABIERTOS. (RIOS)

La composición de estas muestras puede variar en función de muchos factores, como caudal, profundidad, distancia de la fuente, etc., lo que acaba obligando al analista la toma de muchas muestras en períodos consecutivos. También existe diferencia en que se trata de un medio limpio o contaminado, ya que en el primer paso podemos contaminar la muestra si no la tomamos bien. Los equipos a utilizar dependen de la profundidad a la que se debe realizar la toma de muestra. La profundidad se controla con la longitud de la cuerda que sujeta la cesta, estos contenedores son normalmente de PVC o de teflón, e incluso en determinadas circunstancias existen unos muestreadores automáticos que constan de varios contenedores (hasta 24) acoplados a una cesta, conectados a una bomba, que permitirían tomar muestra cada hora en un determinado momento de la misma, con un equipo de filtración incorporado si es necesario, suelen llevar acoplados termómetros. Se deben evitar puntos superficiales o muy cerca del fondo en la toma de muestra, y además si se trata de muestras limpias de mares, ríos, estuarios, se ha de extremar la precaución para evitar la contaminación de la muestra.

1. MUESTRAS LÍQUIDAS EN MOVIMIENTOS EN SISTEMAS CERRADOS. (TUBERIAS)

En sistemas cerrados como en tuberías o canalizaciones de una industria, la velocidad de flujo es el parámetro que controla el nivel de homogeneidad.

Si el caudal es bajo predomina el flujo laminar, por lo que la velocidad es máxima en el centro del tubo descendiendo a medida que se acerca en la paredes, por ello se recomienda crear una turbulencia antes del punto previsto de toma de muestra mediante la inserción de un ángulo en la conducción o bien tomar muestras en puntos transversales diferentes a la masa líquida.

Si el flujo es alto, entonces el régimen es turbulento, con lo que el líquido se encuentra suficientemente homogeneizado. Obviamente la muestra se toma es sentido opuesto a la del flujo del líquido, también el diámetro del tubo de toma de muestra deberá adaptarse a la velocidad del flujo de la misma.