El paradigma funcional en la lingüística del S.XX

¿Cómo influyó el paradigma funcional en la lingüística del S.XX?

La lingüística del S.XX venía planteando casi en su totalidad el estudio de la lengua a partir de la perspectiva que proporcionaba el paradigma formal o lingüístico, modelo integrado por una serie de corrientes o escuelas que abordaban el estudio del lenguaje y de la lengua como un sistema o entidad abstracta. Esta perspectiva desestimaba la consideración del lenguaje y de la lengua como una actividad humana que debía ser estudiada y explicada como tal.

El paradigma formal y el paradigma funcional

Por el contrario, el paradigma formal se centraba en el estudio de la forma, no de la función del lenguaje y de la lengua. Sus dos grandes escuelas eran el estructuralismo de Saussure y el generativismo de Chomsky. El paradigma funcional irrumpe en el panorama de la lingüística del S.XX a partir de los años 70. Este modelo se caracteriza por la diversidad de propuestas que engloba, que podrían concentrarse en torno a dos grandes vertientes o escuelas: el funcionalismo americano y el funcionalismo europeo, al que se adscribe, por ejemplo, Michael Halliday.

Objetivo del paradigma funcional

El objetivo común de las propuestas que integra el paradigma funcional es describir la lengua a partir del estudio de los usos reales de los hablantes en situaciones comunicativas concretas. En otras palabras, pretende relacionar la estructura del lenguaje con las necesidades, los propósitos, los medios y las circunstancias de la comunicación humana. En la consecución de este objetivo tienen mucho que ver las ciencias del lenguaje como la Pragmática, la Lingüística del Texto o el Análisis del Discurso Oral, pues se encuentran más cercanas al estudio del lenguaje como actividad que se produce en contextos comunicativos reales que al estudio del lenguaje como sistema abstracto. La más influyente, por su temprano nacimiento, fue la Pragmática, que ofreció con sus investigaciones una base desde la que avanzar en el estudio del uso del lenguaje; las otras dos, que surgieron más tarde, se aprovecharon de los avances en el estudio del lenguaje motivado por esta perspectiva y lo enriquecieron con sus logros específicos.

Antecedentes y postulados del paradigma funcional

Entre los antecedentes del enfoque funcional se encuentran algunos elementos básicos del estructuralismo, como la noción de habla, o del generativismo, como la noción de actuación. De hecho, ya algunos componentes de escuelas estructuralistas como los representantes del Círculo de Praga, André Martinet o Eugenio Coseriu, avanzaron el hecho de que la lengua no es un producto, sino un proceso continuo de adaptación a las necesidades comunicativas de los hablantes.

Entre los postulados básicos del paradigma funcional relacionados con la teoría del lenguaje se halla la idea de que éste es un instrumento de comunicación motivado pragmáticamente, en el sentido de que las lenguas, tal y como las conocemos, se han ido configurando como respuesta a las necesidades de comunicación en acciones interactivas inscritas en contextos específicos. Por otro lado, sobre el modelo de lengua el paradigma funcional antepone los conceptos de actuación y habla a los de competencia lingüística y lengua, pues su objetivo es el estudio de los datos reales del habla y la actuación, y no de abstracciones: parece lógico si tenemos en cuenta el hecho de que consideran la lengua como el soporte de las necesidades comunicativas de los hablantes, que condicionarían en último término los significados lingüísticos y las estructuras que les sirven de vehículo.

Representación del modelo de lengua

Por último, la representación del modelo de lengua del paradigma funcional se plasma en las gramáticas funcionales, que ponen en relación la estructura del lenguaje con las necesidades, propósitos, medios y circunstancias asociadas a las diferentes situaciones comunicativas. Un ejemplo de este tipo de gramáticas para el español es la de César Hernández Alonso (1984).

Conclusión

En conclusión puede decirse que lo que aporta el paradigma funcional a la lingüística del S.XX es la atención al estudio del uso de la lengua, precisamente lo que el paradigma formal había rechazado al constituir una teoría sobre la lengua y el lenguaje. Las consecuencias que tiene este hecho se dejan sentir en muchos ámbitos, por ejemplo, en el de la didáctica de la lengua. Así pues, el paradigma funcional influye la enseñanza de la lengua poniendo el acento en que la escuela debe proporcionar a los estudiantes no sólo conocimiento sobre su propia lengua, sino también dotarles de la habilidad para poder usarla en los contextos en que se desarrolla su vida.