Platón: vida, pensamiento y legado

Contexto

Su verdadero nombre era Aristocles, nació en Atenas en el 427 a.C. Fue el magisterio de Sócrates y su injusta condena a muerte lo que determinó el pensamiento de Platón. Vivió una época convulsa, en la que Esparta venció a Atenas en la guerra de Peloponeso e implantó la oligarquía de los 30 tiranos. En su obra más importante, la República, Platón nos enseña un modelo ideal de Estado, un lugar en el que no tenga cabida la injusticia, como la condena de Sócrates. Platón no se limita a formular un modelo teórico, sino que trata de llevarlo a la práctica, y para ello viajó 3 veces a Siracusa. A esta implantación práctica se le une la fundación de la Academia. La intención fundamental de Platón es formar a los gobernantes. Falleció en el 347 a.C.

Contexto cultural

En cuanto al contexto cultural, la filosofía nace en el s.VI a.C. Al principio no había libros sagrados ni dogmas de fe. Incluso dioses y hombres se encuentran sometidos a la moira que “adjudica a cada uno su parte”, así a unos les toca ser dioses y a otros hombres. La relación entre dioses y hombres se hacía a través de los oráculos, que tenían una finalidad divina. Como religión triunfó el orfismo, que pregonaba la inmortalidad del alma y el cuerpo como cárcel de ésta, idea que tomará Platón en su filosofía. Además de esto, la religión se identificaba en la mitología, y Platón utiliza el mito para facilitarnos el entendimiento de sus teorías, siendo el mito la narración en la que fenómenos naturales y sociales son explicados por la intención de los dioses, seres con las mismas pasiones y deseos que los humanos, pero inmortales, y era divulgada por los poetas y artistas, como Fidias y Mirón, mediante el género histórico de la tragedia griega.

Contexto filosófico

Atendiendo al filosófico, Platón tuvo mucha influencia de otros filósofos. Entre ellos se encuentran los Pitagóricos, de los que heredó las matemáticas, sin las cuales creía que no se podían conocer las ideas, y el orfismo. También heredó el nous de Anaxágoras, una fuerza que inspiraba el movimiento, y decidió llamarlo demiurgo. Platón intentó mediante el demiurgo solucionar el inmovilismo de Parménides, y explica las características del ser, además, de Parménides adopta las características de un existente mundo aparente, sin embargo, mientras Parménides dice que todo es apariencia, Platón dice que hay un mundo aparente, el mundo sensible, pero afirma a su vez la existencia de un mundo real, el de las ideas, el mundo inteligible. Platón adopta de Leucipo y Demócrito el atomismo, el devenir de Heráclito, su planteamiento del mundo sensible y, sobre todo, adopta las enseñanzas de su maestro Sócrates frente a los sofistas, que provocaron el pensamiento antirrelativista de Platón, que tomó el intelectualismo moral de Sócrates.