El Realismo: nacimiento y desarrollo en su contexto social

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En 1848 Karl Marx publica el Manifiesto Comunista donde define el socialismo como una doctrina científica basada en el materialismo histórico. En ese mismo año se produjo en Francia la llamada Revolución del 1848 que se caracterizó por el singular protagonismo que tuvieron los grupos obreros organizados. La historia cambiaba de signo por primera vez desde la Revolución Francesa iniciando una era de agitaciones sociales revolucionarias.

Es fundamental tener muy en cuenta este trasfondo histórico sugerido para comprender lo que estaba pasando en el terreno del arte, dominado a partir de la década de 1840 por grupos que se autoproclamaban “realistas”. Significativamente, en la Exposición Universal de París de 1855, el más señalado representante de estos nuevos artistas rebeldes, Gustave Courbet, se construyó un pabellón particular para exhibir en exclusiva su obra y puso en el cartel de la entrada: “El Realismo”.

¿Por qué era revolucionario ese cartel?

Los griegos ya definieron el arte como una imitación de la realidad y esta definición del arte fue luego asumida por los artistas del Renacimiento y sus sucesores. En cualquier época de la historia del arte occidental pueden encontrarse obras realistas, desde los bustos romanos al Barroco.

Lo que entendía Courbet por Realismo iba más allá. En primer lugar, era una reacción frente al Romanticismo, que se evadía de la realidad en pos de la imaginación y se declaraba rabiosamente subjetivo. El Realismo fue antirromántico y una de sus preocupaciones fundamentales fue cumplir con uno de los preceptos generales que se planteaba el arte en ese momento en su lucha modernizadora: el heroísmo de la vida moderna, en palabras de Baudelaire que pensaba que los artistas debían ocuparse su realidad inmediata planteando la modernización de los contenidos de la obra de arte.

Lo que se demandaba ahora era inspirarse en la actualidad de forma indiscriminada, no rehuyendo ningún tema por vulgar que resultara y ningún tipo humano, por anónimo o repulsivo que pudiera parecer. Estos realistas querían para su arte la realidad toda y no solo algunos de sus aspectos mas amables o singulares.

Aunque el Realismo toma del Romanticismo su interés por la observación directa del natural (Gericáult, Delacroix, Constable), destierra los temas literarios y las historias del pasado; los héroes de la Antigüedad son reemplazados por obreros y campesinos, indigentes... Ciertamente, el Realismo va unido a los movimientos sociales de la época.

También a los avances científicos y tecnológicos, como el desarrollo del ferrocarril y de la óptica, por no hablar de la industria fotográfica, que influyen en la nueva manera de mirar la realidad. La influencia de la fotografía no afectó tanto a las técnicas pictóricas (pincelada oculta y minuciosidad en los detalles) como a la mirada: la pintura aprendió de la fotografía los nuevos encuadres que acabarían con la artificialidad de los gestos y las composiciones académicas. En el realismo, así pues, convergieron muchos aspectos: el positivismo filosófico, la ciencia, el socialismo, el nuevo estilo de vida urbano o la fe ciega del progreso. Era el arte de una sociedad que veía, sentía, creía, pensaba y soñaba de una

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