Valores Éticos y Convivencia Social

Valores Éticos

El Fundamento de la Convivencia

1.1 La Vida en Sociedad

Todos buscamos la felicidad personal y la de nuestros seres queridos. Pero para lograrlo necesitamos una sociedad justa. La convivencia es difícil debido a nuestras motivaciones egoístas e individualistas, pero también altruistas y solidarias. La educación ética y moral de los ciudadanos ayuda a prevenir los conflictos y a posibilitar la convivencia. Dicha educación se realiza transmitiendo valores y costumbres.

1.2 Las Normas que Regulan la Vida en Sociedad

Existen diferentes tipos de normas que regulan la vida en sociedad:

• Normas sociales o de urbanidad: indican cómo debemos comportarnos en sociedad para no ser maleducados.
• Normas morales: indican cuáles son los comportamientos buenos o malos.
• Normas legales: son los códigos de conducta impuestos por alguna autoridad.

¿Qué son las normas?

Las normas son las que regulan nuestros comportamientos para proteger o desarrollar ciertos valores que aseguren la convivencia entre las personas.

¿En qué somos iguales?

A lo largo de la historia, diferentes corrientes de pensamiento han reconocido la igualdad esencial de todos los seres humanos:

• Tradición judeo-cristiana: todo hombre es hijo de Dios.
• Humanismo del Renacimiento e ideas ilustradas: todo ser humano por el hecho de ser persona es sujeto de derechos.
• Cultura griega: la dignidad la tenía el que era ciudadano de la polis, una parte del todo.

Estos conceptos nos confieren una cualidad especial: la dignidad. Ha sido el descubrimiento más importante de la humanidad.

Dignidad, Derechos y Deberes

¿Qué es la dignidad?

Las personas son valiosas por lo que son, no por lo que hacen o por lo que tienen. Llamamos dignidad al valor intrínseco que tienen todos los seres humanos. De la dignidad se derivan los derechos, como el derecho de opinión y conciencia.

No debemos olvidar que nuestra posibilidad de ser felices se basa en una serie de principios. Necesitamos vivir en una sociedad justa, donde tengamos la posibilidad de poder desarrollar nuestros proyectos personales. Esta sociedad no existe y tenemos que construirla a través de nuestros compromisos sociales y políticos.

La construcción de una sociedad justa debe fundamentarse en el respeto y la defensa de la dignidad de la persona. De la dignidad se derivan los derechos fundamentales que protegen el acceso a aquellos bienes y valores imprescindibles para el desarrollo integral de la persona.