Conclusión de signos vitales

Los signos vitales (o constantes vitales o signos cardiales) reflejan el estado fisiológico del organismo, y dan información importante para evaluar el equilibrio homeostático. Incluyen:

-Temperatura, pulso, respiración y presión arterial.

El término vital se debe a que la información que proporcionan es el indicador más claro del estado de salud general.

1. La Temperatura: representa el equilibrio entre la ganancia y la pérdida de calor, y se regula por el hipotálamo y el encéfalo.

2. El Pulso: es un índice de actividad cardíaca. Evalúa la frecuencia, ritmo y volumen.

3. La Respiración: hace referencia al acto de introducir oxígeno y eliminar CO2.

4. Presión arterial: proporciona información sobre el estado del corazón, arterias, resistencia vascular y gasto cardíaco.

5. Evaluación del dolor (es considerado el 5º signo vital, aunque realmente no lo es). Debe ser evaluado justo con el resto de los signos vitales. Proporciona información sobre la calidad de vida del paciente, localización, intensidad, tipo de dolor, etc.

Los factores que influyen en los signos vitales son: la edad, el sexo, raza y herencia, fármacos, dolor y ritmos circadianos.

Medición de la temperatura corporal

Cuando la temperatura asciende bruscamente, el paciente presenta cuerpo caliente al tacto, rubor fascial, aumento del pulso y respiración, malestar, convulsiones (especialmente cuando aumenta la Tº bruscamente en niños). Y, cuando disminuye por debajo de lo normal, la persona sufre hipotermia.

-Las temperaturas oral y rectal reflejan la temperatura interna del organismo.

- La temperatura timpánica y axilar son más variables, pero clínicamente aceptables para detectar los cambios de temperatura importantes.

-El intervalo normal en la temperatura oral es de 36 a 37,5 ºC.

-La temperatura rectal es de aproximadamente 0,38ºC más (que la oral).

-En el conducto auditivo es de 0,19ºC más (que la oral).

-La temperatura axilar es 0,38ºC menos que la oral.

Puede varias según la edad (más baja en ancianos) y en los momentos del día (más baja por la mañana), el ejercicio también modifica la temperatura corporal, etc. El termómetro es el instrumento de medida de la temperatura corporal. A partir de 1988 la American Hospital Association acordó eliminar el Mercurio del entorno sanitario. Por lo que actualmente se usan termómetros electrónicos con capuchones desechables en los hospitales. Existen tiras termosensibles que modifican su color conforme varía la temperatura, pudiendo monitorizarla durante 48 h permitiendo una lectura continua. Los signos de la fiebre (>37,8ºC) son: sudoración en la superficie corporal, el cuerpo se nota caliente al tacto, rubor facial, el paciente se queja de frío y calor de forma alterna, aumento del FC y FR, quejas de malestar y cansancio, labios y piel seca, convulsiones, especialmente en niños.