La escuela infantil- intervención con familias recién llegadas

Intervención en el periodo de adaptación
Es el que transcurre desde que el niño accede al centro hasta que se integra plenamente en él.
Algunos consejos el respecto son los siguientes.
*Que actúen con naturalidad, explicándole al pequeño que va a ir a la escuela, que jugará con otros niños y que se lo pasará muy bien.
*Que se despidan del pequeño diciéndole que se va a quedar con la educadora y los otros niños y que más tarde pasarán a buscarlo para ir a casa.
*Que no eternicen la despedida, pues el pequeño y también ellos, lo viven como una situación angustiosa y la separación como un acto trágico.
*Que no haya aglomeraciones en la entrada.
*Establecer un periodo de adaptación en el que la estancia del pequeño en el centro sea progresiva.
Intervención con familias de niños con discapacidad o problemas conductuales
Algunos padres piensan que la inclusión del alumnado con necesidades educativas especiales en el aula ordinaria retarda el ritmo de aprendizaje de los niños que no presentan necesidades específicas.
La atención de las necesidades educativas de todo el alumnado debe plantearse desde la perspectiva global de centro y debe formar parte de la planificación de centro.
Este alumnado gracias al trabajo de los Equipos de Asesoramiento Psicopedagógico (EAP) y de los Centros de Desarrollo Infantil y Atención Temprana (CDIAT) suelen ingresar en la escuela infantil con un dictamen o informe de escolarización en el cual se orienta sobre las carácterísticas particulares.

Intervención con familias recién llegadas
En educación infantil no son admisibles actitudes paternalistas o de superioridad, mediante las cuales se discrimina a las familias en función de su grado de afinidad con las creencias del centro educativo.
Cuando se trata de una familia recién llegada a nuestro país además será necesario tener en cuenta unas consideraciones adicionales:  *Se les deberá informar de manera adecuada de nuestro sistema educativo, de los recursos disponibles, de la posibilidad de solicitar ayudas, hábitos aconsejables, etc.  *Se deberá garantizar un proceso de comunicación eficiente. Utilizando el servicio de mediación o traducción si es necesario. Si es necesario el centro elaborará un plan de adaptación del menor.  *Se deberán atender las necesidades afectivas y emocionales derivadas del impacto emocional que para muchas familias suponen los procesos migratorios.
Otro aspecto es la lengua materna. Nada más lejos de la realidad, los niños que tienen contacto de manera natural con más de una lengua antes de los tres años.
Prevención de conductas violentas Los factores que se producen dentro del ámbito familiar, que coinciden en la formación de conductas agresivas son los siguientes: *Una actitud carente de afecto y de dedicación, durante los primeros años. *Si los padres utilizan habitualmente el castigo físico y el maltrato emocional para afirmar su autoridad. *Una alta permisividad ante conductas agresivas de los pequeños. *Las discusiones entre la madre y el padre, si están presentes los pequeños. *Ver la televisión sin ningún tipo de control u orientación.
El cariño y la dedicación de la persona que se encarga de la crianza del menor, unos límites bien definidos sobre las conductas que se permiten y las que no, y el uso de métodos educativos correctivos no físicos, contribuyen al desarrollo de niños independientes y armoniosos.