La nutrición en los animales: Superficies de intercambio y proceso de la nutrición

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La nutrición en los animales

1.1 Las superficies de intercambio

Las superficies de intercambio permiten el intercambio de sustancias entre el medio interno y el medio externo. Está formado por un conjunto de líquidos del interior del organismo mediante los cuales se produce el intercambio de sustancias. Las principales superficies de intercambio son:

  • La superficie de absorción digestiva: a través de ella, penetran los nutrientes resultantes del proceso de la digestión de los alimentos.
  • La superficie respiratoria: los gases como el oxígeno y el dióxido de carbono, entran y salen, a través de ella, por el mecanismo de la difusión.
  • La superficie excretora: las sustancias de desecho pasan, a través de ella, desde el medio interno hacia el medio externo.

1.2 El proceso de la nutrición

Los animales somos heterótrofos, es decir, elaboramos nuestra propia materia orgánica a partir de otra preexistente para construir nuestras propias estructuras y para obtener la energía necesaria para fabricar todos nuestros procesos vitales. Este proceso consta de varias etapas:

  • La ingestión: consiste en la introducción del alimento en el interior del organismo. Para ello, los animales presentan estructuras que les ayudan a realizar esta tarea (tentáculos, manos...) o a su ingestión (boca, pico...). Además, los animales, al ser aerobios, necesitamos oxígeno para que las células puedan degradar (oxidar) las moléculas incorporadas al medio interno. Este proceso forma parte de la respiración.
  • La digestión: si el organismo pluricelular es sencillo, los alimentos son captados e incorporados directamente a la célula que los digiere. Si el organismo pluricelular es complejo, el alimento ha de sufrir un tratamiento previo, mecánico y químico, que los convierte en moléculas más sencillas (nutrientes) que puedan ser incorporadas a las células. Esto es la digestión.
  • La circulación: el sistema circulatorio es el encargado de distribuir a todas las células del organismo pluricelular los nutrientes y el oxígeno absorbidos e incorporados al medio interno.
  • La excreción: una vez las células metabolizan el alimento, producen sustancias de desecho no aprovechables por el organismo. El sistema circulatorio transporta estas sustancias de desecho hasta las estructuras especializadas que las expulsan al exterior, en el proceso de excreción. El dióxido de carbono es una sustancia de desecho que producen las células, pero que se expulsa a través de la respiración.

Hay que diferenciar dos conceptos: la egestión y la excreción. La excreción es la expulsión de los desechos del metabolismo, mientras que la egestión es la eliminación de restos de alimentos que el organismo no es capaz de absorber.

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